"La tecnología nos facilita las cosas y nos mejora la vida". Que le digan eso a Cathy Fulop, que esta semana sufrió un tremendo cachetazo de la modernidad y debe estar insultando y echando maldiciones a todo lo que es dos o tres puntocero. A la venezolana le hackearon el mail y desde allí le invadieron todas sus cuentas tanto económicas como digitales.
Efectivamente, Fulop la pasó muy mal en las últimas horas, algo por lo que se responsabilizó. "Pasa que yo tengo claves que son muy bobas, y después todo es muy fácil de sacar. Qué se yo, soy una persona grande, tengo todo eso para estar comunicada con la gente y también con la familia. No le hago daño a nadie, pero fue muy feo", explicó.
Luego, la participante de la tercera edición de Masterchef -se destaca en las preparaciones relacionadas con su país y algunos ya dicen que es candidata a llegar lejos- manifestó que "de pronto me empezaron a llamar todo el tiempo con números que eran de Rosario, de Córdoba, de República Dominicana y hasta de los Estados Unidos. La persona que me hablaba tenía un tono ecuatoriano, no era argentina".
"Me pasó porque tengo claves muy bobas, muy tontas, fáciles. Me llamaron un montón de veces y me extorsionaron. Me pedían 900 dólares en bitcoins, o algo así porque no entiendo mucho".
"Me llamaron un montón de veces y me empezaron a extorsionar. Por ahí para alguien puede parecer poco, o no tanto, pero me pedían 900 dólares en bitcoins, o algo así porque yo tampoco se muy bien cómo es todo eso. Me dio un sustico porque la cosa se puso muy difícil en un momento", agregó.
Según Fulop, el peor momento sucedió porque "ellos sabían todo. Estaban en mi mail y desde ahí tenían acceso al resto de las cosas. Me estaba ayudando alguien muy muy importante de estos temas digitales, que conoce mucho de todo esto, un experto groso, grande, y esta gente que me extorsionaba hasta conocía sus nombres. O sea, sabían todo".
"Esta persona del tono, no sé, ecuatoriano, me decía "tal persona que te está ayudando, en realidad te dice que te está ayudando. Esas personas son los que colaboran con nosotros o con otros estafadores. Ahí me asusté mucho porque no sabía hasta donde podían llegar. Hay que tener mucho cuidado con estas cosas gente, que esto que me pasó les sirva a los demás", finalizó.
