La estadía se prolongó a un periodo extenso, casi indefinido para Nora Colosimo, quien se trasladó a Europa para ayudar a su hija Wanda Nara hace varios meses. Esa primera idea de cuidar a los nietos mientras la blonda y Mauro Icardi viajaron a Äfrica se extendió y por eso sigue en París, donde salió a pasear con las hijas de la influencer.
Se ha hablado hasta el hartazgo respecto al rol de la suegra del futbolista, incluso se especuló con un arreglo económico que consensuaron con Wanda. Lo cierto es que Nora ama caminar por las calles del viejo continente, principalmente por la capital de Francia y Milán.
En ese aggiornamiento a las tendencias, Colosimo aprendió de Nara la pulsión por postear hechos cotidianos en sus perfiles digitales y en esa sintonía ya adquirió la gimnasia de alimentar con fotos y videos sus plataformas, como en una especie de legado de su hija.
Evidentemente, Nora armó un plan, un proyecto para entretener a las más chicas, a Isabella y Francesca y por eso abandonaron la comodidad de la mansión para recorrer algunos puntos atractivos de la ciudad de la luces.
De esta manera, la madre de Zaira capturó unos momentos con la lente de su celular, como esa corrida muy amorosa de las gurruminas con los perros, uno el propio de Nora que se llevó de Argentina, y que se llama Jana, y el otro que es de Wanda.
Luego de caminar por esas arterias tan coquetas, la abuela de las niñas se detuvo en una confitería impresionante para solicitar una merienda maravillosa, que degustaron las tres. Además, no se quiso perder la posibilidad de acercarse a la Torre Eiffel y ahí se sacó algunas postales con Isabella y Francesca cuando el sol ya había caído en el horizonte.
