No le interesa los discursos políticamente correctos, ni los modales atildados. Furia grita, ordena, exige, insulta y vocifera todo tipo de exclamaciones en el interior de la casa de Gran Hermano. Alimentada en su ego por diferentes movidas en el reality, ahora volvió a solicitar que eliminen a otra compañera.
La táctica de fulminar a Denisse González, la semana pasada, le rindió frutos porque el público la votó para salir de la competencia. Evidentemente siente que dispone de un apoyo descomunal en el exterior, dado que en las últimas horas señaló a Rosina Beltrán como su próxima víctima.
Juliana Scaglione se la agarró con la uruguaya y admitió que no la soporta, que no comulga con su ser, con su estilo, con su modo de vivir. Así, se le ocurrió enviarle un mensaje a su ejército de fanáticos, que llamativamente es populoso, para que activen todos los mecanismos para llenarla de votos el domingo.
La revelación de su hastío con Rosina se produjo en la cocina, durante una charla con su aliada Catalina y también con Emmanuel. Ahí, Furia analizó la supuesta postura de temor de Beltrán por formar parte de una placa gigante de nominados, por diversos motivos.
FURIA QUIERE ELIMINAR YA A ROSINA DE GRAN HERMANO
“¿Posta tiene miedo de la placa?”, gritó Juliana sobre la charrúa. E inmediatamente reconoció que desea con todas sus fuerzas que salga para siempre de la casa al bramar con un tono tajante: “Bueno ya es momento que se vuelva a Uruguay igual”.
Respecto a los factores que inciden en esa nula empatía con Beltrán, Scaglione testificó: “Hace 102 días que me la estoy fumando”. Una frase típica, con esa tendencia a un lenguaje soez y soberbio. ¿Los admiradores accionarán en consecuencia? ¿Será Rosina la próxima eliminada?
