El actor anunció en redes sociales la suspensión de la función de Un judío común y corriente por los problemas de salud que padeció.
El domingo 21 de mayo Gerardo Romano fue internado de urgencia por un cuadro de neumonía que presentó durante la tarde-noche. La información llegó a través de su cuenta de Instagram, en donde informó sobre su estado de salud y anunció la suspensión de la función del día.
El actor debía presentarse en Un judío común y corriente, pero el deterioro sufrido lo llevó por otro camino. Sin embargo, la noticia preocupó a sus fanáticos, quienes lo apoyaron y entendieron las razones de la ausencia del protagonista de la obra Charles Lewinsky, en la versión en español de Lázaro Droznes y con dirección de Manuel González Gil.
Los últimos meses fueron bastante difíciles para uno de los protagonistas de El Marginal, ya que fue denunciado por Paula Di Chello por abuso y maltrato. Además, reavivó la fuerte pelea que tuvo con Ana María Picchio, quien declaró que le pegó una piña en su momento.
A pesar de todo, Gerardo peleó contra viento y marea para seguir adelante con lo que más le gusta, la actuación. A sus 76 años sigue más vigente que nunca, pero las cuestiones de salud le impidieron presentarse en una nueva función del unipersonal que realiza en el Chacarerean Teatre.
“Pido disculpas a los espectadores de hoy, pocas veces lamenté tanto cancelar una función, pero debido a cuestiones médicas estoy internado y no podré hacer Un judío común y corriente. Los abrazo. Se cancela la función, domingo 21", compartió Romano en su Instagram.
Más tarde, cuando se estabilizó y se calmaron las aguas, el artista le confirmó a TN el proseguir que le recomendaron los doctores: “Me van a dejar acá un par de días para estar seguros”. Por si fuera poco, también se comunicó con Teleshow y habló sobre su estado actual: “Sí, está todo bien”.