Los días comenzaron a correr y la convivencia dentro de la Casa se va tornando un tanto más complicada siendo que se trata de 18 participantes, desconocidos entre sí, de distintas edades y bajo un mismo techo, con el ingrediente de que son observados constantemente.
En ese contexto, con ansías de llevarse los 15 millones de pesos y pensando en el juego, cada uno de los nuevos integrantes de Gran Hermano comenzó a hacer alianzas y pensar estrategias a fin de superar las distintas nominaciones y conquistar tanto el adentro como afuera.
Con perfiles tan distintos como marcados, lo que seguramente fue el objetivo de quienes hicieron el casting para los participantes de esta nueva edición, cada uno de ellos dio detalles de sus personalidades, gustos, y algunos, incluso, ya anticiparon cómo planean jugar.
Una de las que habló al respecto antes de entrar a la Casa fue Julieta Poggio, la modelo, actriz y profesora de educación física de 20 años, quien seguramente, más allá del premio en dinero, con su ingreso al reality pretende alcanzar fama y popularidad.
“Mi lugar en el mundo son las cámaras y el escenario”, deslizó la joven integrante de la nueva edición de GH horas antes de que se dé inició a la competencia televisiva. Además, en la misma charla, la hermosa rubia se refirió a su plan de juego para llegar a la final, “mi estrategia es ser yo misma, no fingir y siempre ser sincera”.
"Mi estrategia es ser yo misma, no fingir y ser siempre sincera. Soy desordenada y quilombera", adelantó la modelo de 20 años.
Asimismo, Julieta profundizó en cuáles son sus fortalezas y reveló “Son que me importa poco lo que digan de mí. ¿Mi debilidad? Es que soy muy llorona. Soy muy desordenada y quilombera”. Y, teniendo en cuenta el cruce que mantuvo con Martina, su compañera dentro de la Casa, a días de haber entrado… Poggio no mintió, al menos, en esto último.
