Los integrantes de LAM contaron que María Eugenia los intimó de manera legal.
El ensordecedor ruido, ese que generó con su accionar, parece que la indujo a tomar una decisión tajante. No le simpatizan los medios de comunicación, una postura que exteriorizó en reiteradas ocasiones, a pesar que son las plataformas que la promocionan en su faceta profesional y actúan de puente con el público.
La China Suárez le escapa a los micrófonos, le rehuye a las cámaras y los cronistas, aunque suele generar todo tipo de señales y actividades para llamar la atención. El rol de la actriz en el Wandagate la posicionó en el centro de la tormenta, por esa maniobra de entrometerse en el matrimonio de Wanda Nara y Mauro Icardi.
Una de las esquirlas de todo el escándalo se incrustó en LAM. Sí, el ciclo de Ángel de Brito se convirtió en el epicentro de los detalles del engaño, en ese entorno brotaron decenas de datos de toda la trama, lo que provocó que María Eugenia sintiera un desapego por los integrantes del ciclo, principalmente con Yanina Latorre.
Ha transcurrido mucha agua bajo el puente, no obstante la ex de Benjamín Vicuña no se olvidó de todos los dichos sobre su persona en el programa y decidió ejecutar una acción legal, dado que les envió una carta documento a Ángel y Latorre.
Todo esta movida álgida, que implica una disputa en el ámbito de la justicia, adquirió visibilidad de la mano de Yanina, que este lunes contó: “La China me mandó carta documento, hoy me llegó. A vos también Ángel y a Mandarina y a eltrece”.
Lo más llamativo del caso se entrelaza con las paces que firmaron, simbólicamente, de Brito con Suárez, ya que el domingo lucieron muy compinches en una fiesta pos celebración del Martín Fierro. Por eso el conductor bramó: “No sé para qué bailamos ayer. Se me hizo la simpática y me mandó carta documento”.
La panelista trató de aportar un poco más de sustento a esa misiva que accionó la China y sostuvo: “Habla de daños y perjuicios, con mediación, pero no dice el motivo específico”. Así como la blonda confirmó la fecha de ese careo tenso: “Está pautada para el primero de junio a las once de la mañana, ahí va a ser la mediación”.