A fines de noviembre, el día de la presentación de su línea de accesorios, Morena Rial sorprendió a todo el mundo con una noticia que nadie se veía venir. A casi un año de estar en pareja con el futbolista cordobés Martín Casar, la hija de Jorge Rial le ponía punto final a ese promocionado noviazgo a poco de haberse mudados juntos a un departamento en el barrio de Nuñez.
Hoy, en pleno mes de enero, la morocha dio un paso más luego que el chico intentara reconquistarla en un primer momento, mostrarse con una rubia cordobesa después y que se lo relacionada con un modisto de esa misma ciudad más tarde. ¿Qué hizo? Se sacó el tatuaje que se había pintado en su cuerpo con el nombre de “Martin”. Y en su red social de Instagram escribió lo que sería una lápida: “Errores uno siempre los puede cometer, solo hay que saber taparlos”.
¿Y hoy? Los que la conocen dicen que Morena está sola y bien acompañada por un amigo suyo de años (foto de abajo), al que algunos medios lo llamaron “nuevo novio”. “Estoy tranquila así, cerrando una etapa. Ya vendrán tiempos mejores”, contó en su círculo íntimo.
La historia de los chicos no terminó muy bien.
Morena no quiere saber más nada con el cordobés.
