Verónica Perdomo tenía el mundo en sus manos cuando la vida intentó ponerla de rodillas: era joven, talentosa, tenía éxito y empezaba a construir una carrera interesante en los medios, pero en un puñado de minutos estaba en la terapia intensiva de un hospital peleando segundo a segundo contra la muerte. Un acv masivo casi termina de un momento a otro con todos sus sueños.
Por suerte los médicos no tiraron la toalla ni siquiera en las peores instancias, aquellas que dejaban poco margen para esperar un milagro. Su insistencia, su perseverancia y sobre todo sus conocimientos dieron resultado, y al cabo de una larguísima terapia de rehabilitación la muchacha aprendió a caminar, a moverse, a hablar y a comer de nuevo.
Tuvo que reeducar a su cuerpo porque se le había "borrado toda la memoria del disco rígido". Iniciarse a una nueva vida. Literalmente, le tuvieron que presentar a su familia, a sus amigos, a sus amores. No los reconocía. En esas pérdidas se notaba la magnitud del escollo que había superado. Su lucha por salir adelante había sido, cuanto menos, titánica y heroica. Las operaciones, los implantes, la kinesio y los ejercicios, finalmente, habían quedado atrás.
En el mejor momento de su vida, Vero Perdomo sufrió un ACV. Estuvo al borde de la muerte, pero se recuperó milagrosamente. Tuvo que reaprender a caminar, a hablar, a comer. Y ahora está embarazada. Conmovedor.
Era momento de empezar una nueva vida. Ya no hubo exposición mediática para ella, pero sí un redescubrimiento de sensaciones y de experiencias que fueron primero una aventura y luego una sucesión de momentos placenteros y de disfrute. Pero llegó la pandemia, y como todo el mundo tuvo que cuidarse. Recluirse, asomar poco la nariz a la superficie. El aire del otro lado de la puerta podía traer problemas.
Durante mucho tiempo se supo poco de ella. Casi nada. Hasta ahora, cuando la inquieta Nancy Duré, en su condición de flamante panelista de Intrusos, dio a conocer una noticia tan bonita y dulce como inesperada y sorpresiva: Verónica Perdomo, la misma del milagro, la que se sostuvo entre nosotros aferrada al "cerocoma" de posibilidades que le daban, está embarazada.
"Ella hizo un tratamiento, y espera para fines de abril o principios de mayo. Y fuegrande su sorpresa cuando en la última ecografía le dijeron "acá está un corazoncito, acá un cuerpito... acá está el otro corazoncito...", entonces ella pegó un grito "¿Cómo el otro corazoncito?" y le contestaron "y sí, son gemelos". Así que está esperando dos varoncitos. Hay una cesárea que está programada, pero en estos casos se puede adelantar. Hay que darle una mano, porque hoy todo cuesta horrores y ella multiplica los gastos por dos", contó Nancy. Conociendo su garra, seguro que puede con todo.
