La muerte de Silvina Luna a sus 43 años y luego de una larguísima lucha que comenzó tras la cirugía que se hizo con Aníbal Lotocki, impactó de manera rutilante en la sociedad. Es por eso que ayer en Telefe la homenajearon de gran manera y su tía Vilma reapareció para recordarla.
La entrañable “tía Vi”, que es como Silvina la llamaba, era muy cercana a sus sobrinos. En un móvil especial que enviaron a Rosario, desde allí tuvo palabras de amor para su sobrina a quien siempre recordará como “un ser de luz”.
"Tratando de recordarla de la mejor manera posible, con fotos y recuerdos", fueron las primeras palabras que dijo. Consternada como todos por su partida, Marley rápidamente la asistió con su consuelo: "Totalmente, ese es el objetivo de este especial, recordarla bien, con alegría, como era ella".
Si hay algo que la gran mayoría destaca de Luna, es el carísima único que tenía. Con una calle que mamó en su Rosario natal, los caminos de la vida llevaron a que la modelo intente disfrutar plenamente pese a sus problemas de salud y, aunque era un alma totalmente independiente y libre, jamás se olvidaba de sus principales afectos.
“Realmente era un ser de luz Silvina... Yo le decía que era un payasito, porque vivíamos un montón de cosas juntas, nos maquillaba, por ahí te sacaba una sonrisa de un lado donde vos no querías, y con el famoso meneaito”, remarcó su tía emocionada.
EL ESPECIAL RECUERDO A SILVINA LUNA
Con la mente llena de momentos y hermosos recuerdos que le dejó Silvina, Vilma detalló cómo era dentro de la familia: “Ella venía acá y yo le enseñaba guitarra, y embromábamos, de todo sacábamos una risa, de cualquier cosita nos reíamos. Era un ser de luz que alegraba a todo el mundo que estaba alrededor, por eso la recuerdo con una sonrisa".
Pidiendo justicia al igual que todo su entorno, en esta ocasión la mujer prefirió quedarse con los mágicos instantes que le regaló su sobrina. "Hemos pasado maravillas, cuando era chiquita era una belleza, era una persona hermosa. Siempre con esa fe, con esa energía, que le daba a todo el mundo, hasta a los mismos enfermos les daba energía. Por eso te digo Marley que la recuerdo con el meneaito, porque es muy duro para mí”, concluyó Vilma.
