En un contexto de entretenimiento, de distracción, se vivió una noche de horror, de un trágico desenlace. En el transcurso de la presentación de Fátima Florez, en Mar del Plata, una espectadora sintió una descompensación y terminó en el peor desenlace.
Una mujer, de 38 años, percibió que algo no andaba bien, mientras disfrutaba de la obra de Florez, se retiró al baño y en ese espacio sufrió un ataque cardíaco, del que no pudo sortear a pesar de la ayuda recibida y falleció en el teatro Roxy.
A pesar de la reacción del personal de la sala, así como de la prontisima llegada del servicio de emergencias, que se estima demoró menos de cinco minutos de acercarse al lugar, esta espectadora no pudo recuperarse y lamentablemente apagó su luz.
Ante el encadenamiento de estos tristes hechos, la producción de Fátima es camaleónica decidió suspender inmediatamente la función, por lo cual la sala se evacuó con velocidad para facilitar el trabajo de las distintas autoridades que se apersonaron al teatro.
A partir de lo que informaron los medios locales, el marido de esta mujer detectó que se demoraba mucho en retornar del toilette y se dirigió a dilucidar qué pasaba y se encontró con ese trauma, esa pelea por mantenerse con vida.
Fátima todavía no se expresó públicamente respecto a todo esta tragedia, así como se especificó qué camino tomará la producción en lo inmediato respecto a si continuarán con las funciones con normalidad. Lamentablemente, una espectadora que se acercó a disfrutar del humor culminó con un repentina afección que le quitó la vida.
