El escándalo del viernes 27 de junio en el edificio del Chateau Libertador, cuando Wanda Nara debía entregarle a sus hijas a Mauro Icardi y el pase de mano de las menores se demoró 10 horas, sigue dejando tela para cortar. Es que en ese lapso de tiempo muchas cosas fueron sucediendo.
Entre ellas un polémico cruce que se dio en las instalaciones entre el futbolista y Valentino López cuando, según contó Pampito en Puro Show, el adoelscente se acercó a saludar al ex marido de su madre y este, a fin de cuidarlo le dijo: “‘Andá para adentro’.
Con esa información dando vueltas quien habría puesto el grito en el cielo fue el padre del hijo mayor de Wanda quien, desde Europa, donde está con su actual mujer, su hija y a la espera de un bebé en camino, según cuentan, se comunicó con la empresaria mediática para reprocharle por ese encuentro.
Tal como detallaron, Icardi reaccionó de esa manera a fin de que Wanda no rete a Valentino por haber estado con él. “En el momento de todo ese escándalo habría mantenido un ida y vuelta. Y eso me cuentan que a Maxi lo habría enojado muchísimo”, sumó Juan Etchegoyen.
LOPEZ NO OLVIDA LA ICARDEADA
Y fue el mismo periodista de Mitre Live quien amplió: “No hay ningún lazo sanguíneo de Mauro con los chicos de Wanda y por eso lo irrita a Maxi todo esto y que a Valentino le caiga bien Mauro, no lo puede ver. A Maxi no le gusta nada que sus hijos tengan diálogo con Icardi y que estén metidos en este escándalo".
“Cuando se entera Maxi de la charla de Mauro con Valentino por los medios le pregunta a Wanda y se lo habría confirmado y estalla en furia. Me hablan primero de un WhatsApp de Maxi a Wanda preguntándole si esto era verdad. Cuando ella se lo confirma, él la llama y le pide explicaciones de por qué Mauro sigue con esa cercanía a Valentino, más allá de que no duda que haya un sentimiento afectuoso por todos los años juntos”, contó Etchegoyen.
A lo que el periodista remarcó: “Lo que pasa acá es que Valentino hace lo que quiere porque está en Argentina. Y si lo ve a Icardi, lo va a saludar, le va a preguntar cómo anda y va a mantener un diálogo porque no es mala la relación. Y Maxi, la verdad, para reclamar mucho no tiene: está en Europa, va a ser papá nuevamente. Si vos querés poner límites, es difícil a diez mil kilómetros”.
