En la recta final para que se conozca el ganador de esta edición de Gran Hermano, Nacho fue uno de los que, poco a poco, y tras superar varias placas de nominación, se fue metiendo entre los cuatro candidatos a llevarse el gran premio.
El exintegrante de Los Monitos, y único sobreviviente de ese grupo, que con su bajo perfil y ajeno a las peleas y confrontaciones fue conquistando al público que en tantas oportunidades eligió salvarlo, también sedujo a "La Tora" Lucila Villar.
Ya con su compañera fuera de la casa, y mientras espera con ansias reencontrarse con el afuera y disfrutar de las mieles de la fama y la popularidad, Nacho le confesó a sus compañeros que tuvo un extraño y disparatado sueño que involucraba tanto a La Tora como a Maluma.
Mientras se encontraba higienizando en el baño, el joven se cruzó con Camila, fue a ella a quien le narró lo que su inconsciente había fantaseado esa noche mientras dormía. "Ayer tuve un sueño re flashero y limado. Primero soñé que salía de acá e iba a la casa de Lu. Ella me decía '¿ya abriste tu Instagram?'”, comenzó.
NACHO RECORDO UN SUEÑO ALOCADO CON LA TORA Y MALUMA EN GRAN HERMANO
“Le dije que todavía no y Lu me dice 'mirá'. Me muestra y decía 40 millones de seguidores. Después yo me iba de ahí e iba a comer, era un local de comida pero tenía pileta, todo. Y yo que estaba con un par de amigas mías TikTokers, estaba Maluma, estaba Lu con su mamá y su hermano", continuó Nachito.
Sin poder creer la historia que su mente había creado, el finalista de GH sumó: "Ella me presentaba a su papá. Maluma estaba pero re contra en pedo. Después... Bueno, Lu trabajaba en una parrilla que era cerca de mi colegio. Lu me había dicho acá, esto sí, fuera del sueño, que ella contestaba los WhatsApp seguido. Entonces salíamos de acá y yo le mandaba un mensaje a ella y le puse que estaba yendo a entrenar”.
“Y eran las 10 de la noche y no me había respondido... Yo me había sacado la última vez, la puse y vi que no me quería contestar. Dije '¿qué onda?' y me re enojé. Pasé por la parrilla y ella me decía 'perdón'. Era como raro, me pedía perdón no por contestarme sino por otra cosa. Agarré y me fui al colegio y saludé a los directores, a los profesores... Después me iba y no me acuerdo si me arreglé con Lu o no", cerró Nacho.
