"Cristina, Cristina....Cristina corazón, acá tenés los pibes para la liberación". Pablo Echarri está hecho un pibe, pero ya no lo es. Sin embargo, a los 55 años (cumplirá 56 "abriles" o mejor dicho "primaveras" el 21 de septiembre) marcha, salta, toca el bombo y canta eso como muchos jovencitos reclamando a viva voz la libertad de Cristina Fernández de Kirchner o mejores condiciones para su detención. En las calles de Buenos Aires, mientras el termómetro baja de los 10 grados en pleno mediodía, el calor lo ponen él y todos los que van con él.
CFK está empezando a cumplir los 6 años de condena que recibió por la famosa "Causa Vialidad". Ahora se resolvió que los pasará en su casa. O que empezará a transitarlos allí, en el departamento que ocupa en la popular barriada de Constitución, en el sur de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, cuya puerta se convirtió en centro de peregrinación para simpatizantes K y militantes peronistas que emparentan la situación de la ex presidenta con la de su histórico líder, Juan Domingo Perón, quien estuvo proscripto 18 años desde que fue derrocado por la Revolución Libertadora en 1955 hasta que volvió y reventó las urnas en 1973: nadie, desde el regreso de la democracia, pudo ganar la presidencia como él con el 62 por ciento de los votos. El primero de julio de 1975 falleció en pleno ejercicio de sus funciones.
Echarri ya peina canas, pero el fervor por su líder le hace olvidar la edad y grita como los muchachos de 17, 18, 19 o 20 que lo rodean. Los muchachos peronistas lo han hecho de nuevo: según estimó CFK en uno de los mensajes que mandó desde su "hogar-celda", más de 1 millón de personas invadieron avenidas, calles, callecitas, veredas, plazas y parques de todo el país para demostrar que el movimiento que ella integra -y para muchos lidera- sigue vivo y tiene poder a pesar de las sucesivas derrotas electorales que viene sufriendo a manos de "los libertarios" de La Libertad Avanza. Al menos hoy -más adelante habrá que ver- el que avanzó fue "el pejota".
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Y en la primera línea de esa avanzada estuvo él, Pablo Echarri, un reconocido adherente del "movimiento nacional y popular" encabezado por la ahora presa para algunos y proscripta para otros CFK. En un momento a Echarri le hicieron una nota. Una nota que del otro lado mostraba al periodista especializado en política Ignacio Ortelli. En medio del batifondo, el actor agarró viaje y no paró de hablar. "Creo que una de las intenciones que tiene quienes la han encarcelado, el conservadurismo argentino, es verla con todos esos detalles, con todos esos símbolos, cuanto más indigna la vean más contentos se pondrán. Yo les diría que cuanto más traten de hacer eso más van a enardecer al pueblo. Entonces, si lo que estamos buscando es una convivencia democrática les digo que traten de no hacerlo. Esto es un apoyo a Cristina ante el avance de un sector político, de un sector social-política que tiene a la justicia coptada..." y ahí se perdió su voz.
PABLO ECHARRI MARCHO POR CFK Y SE PELEO MUY MAL Y MUY FEO CON UN PERIODISTA
Atención: la voz de Echarri no se perdió por un problema técnico o por el ruido que había en la calle. ¡No! Se perdió porque Ortelli, desde los estudios, decidió cortarlo y encima dar un discurso recontra contundente contra Echarri. "No, no, hice volver porque estoy cansado de escuchar a este chanta. Este es el mismo chanta que cuando apareció la gente en "La Rosadita" decía que solamente había gente contando dinero, que no le parecía tan grave. Este hombre, que hace mucho que no le conozco un éxito realmente, se piensa que es una referencia, y la verdad que no, la verdad que no tiene legitimidad tampoco. No lo vota nadie, no lo elige nadie, ya no lo elige nadie ya en las películas, así que no lo quiero escuchar más. Al menos yo no lo quiero escuchar más". ¿Lo tenían a Ortelli tan cocrito? ¿No? Bueno, acá lo tienen.
Pero Echarri no se quedó callado, por supuesto. Y con ese video como referencia, le habló directamente a Ortelli y lo trató para el... para el... ¡Para el idem! "Tranquilo Ignacio Ortelli, te va a dar algo. Si los éxitos alcanzados en el oficio fuesen la variable que dan legitimidad en la vida para hablar y expresar una idea, vos vivirías muteado" golpeó el actor que, para ser sinceros, hizo un suceso tras otro prácticamente desde que debutó en la tele y hasta tuvo que terminar algunas novelas en los teatros (Montecristo, por ejemplo) de la demanda de público que tenían. Y después siguió cantando. "Acá tenés los pibes para la...". Porque viejo... viejo es el viento ¡Y sigue soplando!
