Patricia Pacheco participó como invitada del programa Seres Libres y en un mano a mano con Gastón Pauls habló sin censura del vínculo que mantenía Rodrigo con las drogas. Además, se refirió a los últimos minutos que vivió el cantante antes del fatal accidente de tránsito que tuvo lugar el 24 de junio del 2000.
“Hablo ahora porque antes no se podía decir ni ‘a’”, expresó la ex de El Potro al comenzar la entrevista, a modo de justificar las razones por las cuales mantenía en secreto su versión de los hechos.
Respecto a las adicciones de Rodrigo, la mamá de Ramiro Bueno, confesó: “Cuando lo conocí consumía cocaína, consumía muchísimo y tenía plata para hacerlo y también tenía un entorno en el que consumían todos. En los momentos en el que él no estaba en ese consumo, era un pan de dios. Y después, se transformaba en una persona mala. Entraba en cuadro de violencia contra él mismo”.
”Él estaba en un estado de consumo permanente: es muy difícil dejar la noche, a las chicas y eso lo hacía alejarse de todos los problemas que tenía cuando estaba solo. Estaba hasta el cuello de problemas, de presiones y depresiones”, expresó Patricia Pacheco sobre las exigencias que vivía el Potro por su carrera como cantante.
En este sentido, la ex de Rodrigo, sentenció: “No tenía libertad, estaba sometido a un contrato en el que había vendido todo. Él se entregó de esa manera para poder mantener a todos. Eran dueños de él”.
A pesar de los conflictos internos del cordobés, su ex reconoció que era una persona buena, graciosa, valiente y fuerte. Sin embargo, admitió que el triste desenlace que tuvo el cantante era un final anunciado. ”Si no hubiera pasado esto, hubiera pasado de cualquier otra forma“, afirmó Pacheco.
Como testigo del accidente, la ex de Rodrigo dio su visión acerca de la noche trágica. “Esa vez él tomó y esa noche había sido oscura. En el peaje, se empezó a poner loco, se paró a un costado, meó, se tomó una cerveza, se puso a hablar con gente, y cuando volvió a subir a la camioneta sacó lo que tenía en el bolsillo tomó, convidó”, relató.
“Cuando pasa el peaje, le pasa esta camioneta, que lo hace como vibrar y él salió como tiro. Empezó a levantar velocidad, y yo me hice bolita y lo agarre al nene. Fue una cosa impresionante”, reveló Patricia. Y concluyó: “Lo último que hizo fue tomarse un pase”.
