A más de tres años del estallido del Wanda‑gate en París, el escándalo entre Wanda Nara, Mauro Icardi y la China Suárez sigue explotando en cada aparición pública en cualquier parte del mundo. Así estuvieron en Francia, Italia, Argentina, Brasil y vaya uno a saber dónde más.
El affaire revivió en enero, cuando Icardi y la China Suárez blanquearon su relación, y desde entonces, el vínculo del futbolista con sus hijas se tensó aún más. Wanda, furiosa, volvió a encender la polémica en LAM cuando habló del reciente episodio que vivieron sus hijas al salir del colegio.
“Si él tiene algún problema psicológico no lo sabemos porque no acredita una terapia”, arrancó Wanda en su charla con Ángel de Brito, que mostró respaldo judicial a su reclamo.
Luego, fue al hueso: “Cuando fue lo de los inflables, se sabía que el papá tenía que estar solo con las nenas. ¿Qué clase de mujer acompaña al señor Mauro Icardi que permite esto que le genera tanto dolor a dos menores de edad?”, disparó sin filtro.
La consultora Ángel de Brito reforzó la acusación: “¿Qué clase de mujer es la China?”. Y Yanina Latorre la acompañó con otra pregunta lapidaria: “¿Qué clase de mujer creés que es la China Suárez que no ayuda a que Mauro se reconecte con las chicas?”.
Con firmeza, Wanda respondió apelando al testimonio de sus hijas y de lo actuado por el Ministerio Público Tutelar: “Hay un pedido de las nenas de no encontrarse con la novia del padre por un montón de situaciones que sucedieron”.
EN EL DÍA DEL PADRE, SE VIENE OTRA TENSIÓN
Con el Día del Padre a la vuelta de la esquina, la pulseada mediática volvió a recalentar motores. Según confirmaron fuentes judiciales, el juez Hagopian autorizó a Mauro a ver a sus hijas el domingo 15 de junio, pero sin la China presente. El encuentro está previsto en el bar del Chateau Libertador, entre las 13:13 y las 17 h, y se permitirá la presencia de los hijos varones de Wanda.
Mientras tanto, Wanda prepara un gran festejo familiar, con Maxi López —el otro padre— viajando para estar con las niñas, algo que tampoco parece ser tan sencillo después de las declaraciones que se supieron del ex delantero. En paralelo, Mauro podría pasar la fecha “con su nuevo amor”, la China Suárez, en soledad.
En Instagram, Wanda no se contuvo: tras el llanto de una de las nenas al cruzarse con Suárez, posteó furiosa: “Cada lágrima de mis hijas las vas a pagar”, y la acusó de arruinar la revinculación.
Por su parte, la China compartió un video con sus propios hijos y desayunos de medialunas, en un sincero contraste con el momento judicial que le impide acercarse al encuentro del padre con las hijas de Icardi.
Este capítulo del Wanda‑gate dejó al desnudo no solo la tensión entre las protagonistas, sino también una batalla judicial que parece intensificarse justo en un día emblemático como el Padre. Wanda dejó clara su posición: para ella, lo que hace la China no solo daña a dos niñas, sino que también define “qué clase de mujer acompaña a Mauro Icardi”.
