Jorge Rial sabe buscarse los enemigos. Cuando tira, siempre mira para arriba y pone en el mismo ring donde está él a figuras que le suben el precio. Es una fórmula que le ha dado muy buenos resultados y que piensa utilizar, se ve, hasta el final de los tiempos. Ahora, apuntó contra Marcelo Tinelli y Susana Giménez nada más y nada menos.
Tinelli, que es uno de los protagonistas de la fuerte crisis que atraviesa América ya que ostenta el cargo de gerente de programación de la emisora, comparte con Susana la conducción del realitie de humoristas que se llama LOL y es producido por una plataforma con sede en México. Hasta allí fue el conductor del Bailando para trabajar.
Susana hace rato que está "retirada", o algo así, de la televisión argentina. Se vuelta fue anunciada mil veces en formas, formatos y horarios distintos, pero por un motivo u otro nunca se concretó. A Telefé le va bien sin ella, y si bien la tratan como a una figura del canal, ya es más una "madrina" que otra cosa. Pero en esas señales pagas se la puede ver. Ahora, o en un tiempo más, junto a Tinelli.
Rial no banca a ninguno de los dos. Si bien en un momento tuvo una buena relación con ambos, en los últimos meses rompió esos lazos y convirtió a los dos divos de la tele en blanco fijo de sus críticas. Frente al próximo estreno de una nueva temporada de Lol y ante el comienzo de las promociones del ciclo, el conductor de Argenzuela se manifestó sin tapujos ni medias tintas.
JORGE RIAL DESTROZO A MARCELO TINELLI Y A SUSANA GIMENEZ
Rial no se aduvo con vueltas y calificó a la iniciativa como "uno de los peores programas de la historia de la tele". Por si esa frase ya no resutaba lapidaria con el ciclo, les aconsejó a sus 3.338.344 seguidores que no lo miren. "Rajen de ahí" fue su orden.
Con algunas intermitencias donde lograron acercar posiciones y hasta hicieron notass juntos, Rial y Susana mantienen diferencias desde tiempos inmemoriales que se acentuaron en el último tiempo y hasta por cuestiones políticas. Con Tinelli pasó algo parecido pero por otros motivos. Después de un período de tregua, el periodista parece no haberle perdonado al conductor que haga buenas migas con América, el canal que se volvió su enemigo después de que fuera su figura principal por dos décadas.
