Era allá por el 13 febrero cuando explotó la bomba: Sofía Aldrey, quien fue la novia de Federico Bal durante los últimos 3 años, descubrió varias infidelidades por parte del actor y no tuvo mejor idea que capturar chats privados y mandarlos a la prensa.
Dejando expuesto de ese modo los distintos affaire que mantuvo el hijo de Carmen Barbieri con otras mujeres aún estando en pareja con ella, la joven marplatense se cansó del acoso de los medios y, sin intenciones de recomponer la relación con el conductor de Resto del mundo, armó las valijas y se fue del país.
Y si bien hasta ahora poco y casi nada se supo en cuanto a su nueva vida fue el miércoles 22 de junio en LAM que revelaron cuál había sido el destino elegido por Sofía. “Está en Madrid, España”, reveló Angel de Brito, quien en alguna oportunidad se comunicó con ella.
Pero es ingresando a su perfil de instagram donde realmente se puede ver cómo es el presente de la rubia en el viejo continente. Instalada en Europa, la nieta de Florencio Aldrey, un empresario millonario oriundo de La Coruña y propietario del shopping más grande de Mar del Plata, se gana la vida como maquilladora.
“Después de unas lindísimas vacaciones ya estoy agendando makeups, fotos y cursos en Madrid y Barcelona. Les dejo toda la info y cualquier cosa me consultan”, escribió Sofía entre sus historias antes de publicar que entre sus servicios incluye también peinados tanto de novias como invitadas y talleres de automaquillaje.
LOS TALLERES QUE SOFIA ALDREY DICTA EN EUROPA
Asimismo, la ex de Fede Bal posteó una seguidilla de fotos de cómo quedó el trabajo terminado en una de sus mejores amigas, quien se casó y fue ella quien se encargó del estilismo de la novia. Lejos de los flashes y de la exposición, la heredera Aldrey se hace camino sola en Europa.
Cabe recordar que hasta el verano pasado la joven supo mantener un bajo perfil a pesar de ser novia del actor y nuera de Carmen Barbieri. Así y todo, tras haberse visto envuelta en un escándalo como víctima de reiteradas infidelidades por parte del conductor de Resto del mundo optó por resguardarse y escapar de tanta exposición.
