Unas imágenes algo borrosas, pero que aportan varios indicios, diferentes puntos para aseverar semejante accionar. L-Gante fue captado a la salida de un hotel alojamiento con la bailarina Luli Romero, en un video que se convirtió en viral y que desató la polémica. Por eso las miradas se direccionaron a Tamara Baéz, que este sábado hizo lo suyo.
Asiduamente la madre de Jamaica suele mostrar muchos de sus momentos íntimos en las redes sociales, un universo en el que exhibe sus looks, sus cambios físicos y también los avances en cada una de las propiedades que habita con su bebé.
Atenta a todo el ruido mediático en torno a este posible engaño de L-Gante con la bailarina, Tamara se preparó para una velada distinta, disímil a su habitual rutina de cuidado extremo y full time de su niña. En lo que se puede entender como una filosa indirecta contra su ¿pareja?
Báez armó una salida espectacular con amigas, una de esas noches con todos los chiches, con toda la energía de la soltería. La blonda empezó el relato con una canción que interpretó que rezaba: “Sufre una pena pero lo hace en silencio”.
Unas líneas muy peculiares, que suenan a un mensaje de su semblante, de su estado anímico, que puede relacionarse con la tristeza por la infidelidad de su novio y del dolor que estaría latiendo en su interior por este posible desamor.
Luego, Tamara exhibió su look, con una elección de vestimenta muy moderna y que resaltaba su belleza, por lo cual preguntó a sus followers: “¿Va?”. Para después filmarse en una disco con su grupo de amigas en el baño y bailar un perreo. Para terminar, la rubia grabó su regreso a casa con el día amanecido.
