La vida giró radicalmente en los últimos meses. Jey Mammón transitó por un vuelco rotundo en su cotidianidad, desde que se mediatizó la denuncia de Lucas Benvenuto por presunto abuso sexual. A partir de ese momento, el famoso cayó en un pozo hondo.
Se alejó de la televisión, a raíz de la decisión de Telefe de prescindir de sus servicios como conductor de La peña de morfi, así como la sociedad lo posicionó en un lugar incómodo y muchos de sus amigos del medio también le soltaron la mano por la gravedad de las acusaciones.
En todo ese contexto, de dolor, de introspección, de refugio en un bajo perfil, Jey fue soltando algunos indicios de su proyecto para retornar a alguna de las actividades que lo definen, que se entrelazan con las expresiones artísticas, ya sea en los monólogos, el canto o la conducción.
En primera instancia, Mammón soltó que tenía todo arreglado para regresar al teatro e incluso adelantó que podría llevar a cabo temporada de verano en Mar del Plata. En definitiva, el humorista acaba de subirse de nuevo a un escenario y delante de un público.
JEY MAMMÓN SE SUBIÓ A UN ESCENARIO
¿Qué pasó? El propio Jey describió la situación, que se vincula con una noche de esparcimiento, en la que decidió salir a disfrutar de un espectáculo de la Gata Varela. En ese entorno, la talentosa especialista en tango lo percibió y le extendió la invitación de tomar un micrófono.
Mammón especificó lo que sintió: "Anoche fui a ver a la Gata Varela y en un momento me invitó a cantar. Construiste un momento mágico en mi vida única y amada @adrianavarelaoficial. Gracias a la gente que anoche fue testigo y acompañó con tanto amor".
