No sólo de mujeres vive Sex, la transgresora obra de teatro que dirige José María Muscari. Al fin de cuentas, Daniela Cardone, Noelia Marzol, Gloria Carrá, Magui Bravi y Militta Bora no son las únicas que acercan gente al Gorriti Art Center, ahí en Juan B. Justo 1617, de jueves a domingos por la nochecita. También hay muchachos que provocan lo suyo. ¡Vaya que sí! Uno de ellos es el Tucu López, cuyo apodo dejó en decimotercer plano a su verdadero nombre, Luis. Nadie, jamás, lo reconocerá si le dicen Luis López. Para todo el mundo es el Tucu López, y punto.
Locutor recibido y matriculado, nacido en San Miguel de Tucumán y como todo originario de esa ciudad buen degustador de empanadas y sánguches de milanesa, dio el salto al sumarse al proyecto más transgresor del teatro de los últimos años. De aquel conductor simpático pero recatado que se destacó en Telefe (Uplay), La 100 y la Rock and Pop, pasó a ser este sex symbol que provoca todo tipo de comentarios y elogios.
Si no, vean lo que le contó a Catalina Dlugi en su programa Agarrate Catalina: “Lo más loco que me pasó fue que una madre y su hija, que fueron a ver Sex, me invitaron a pasar una noche con ellas. ¡Para psicólogo! Antes de empezar las funciones, yo me presento ante la gente y le pregunto cosas, y también indago un poco sobre sus gustos sexuales. A ellas les dije que eran parecidas y me contaron que eran madre e hija. Y cuando les pregunté por sus cuestiones íntimas, me dijeron: ‘Nosotras tenemos la fantasía de hacer un trío con un chico como vos’. No me espanto casi con nada, pero eso me pareció muy fuerte”.
Además, el Tucu se está acostumbrando de a poco a los piropos que le llegan por las redes sociales. “En Instagram pongo muchas fotos con mi perro Elvis porque somos los dos que vivimos en casa. Y también pongo fotos pelando lomo porque esa es la posibilidad que te brinda el anonimato virtual, que hace que te animes un poco a todo. Y del otro lado también lo hacen, porque así como me llega mucho cariño también me llegaron piropos muy sarpados. Muuuuy fuertes”.
El cuerpazo que luce no es producto de la casualidad ni de un trabajo apurado para llegar a tono a Sex, sino que es fruto de una larga tarea de entrenamiento. “Entreno desde siempre. Desde chico hice artes marciales. Hice jiu-jitsu, karate, pa kua, taekwondo, krav magá. De todo un poco. Entonces siempre tuve un físico trabajado. Entonces me dicen de todo. Desde ‘qué lindo que sos’ hasta destacar alguna parte de mi físico que vieron en el teatro. Y yo lo tomo bien, no me parece nada pesado”, contó el norteño.
¿Una buena para todes? “Estoy soltero. Salía con una nutricionista pero esa gestión ya terminó. No tengo un ideal de mujer. Si buscás algo determinado estás dejando pasar muchas posibilidades. Tiene que ser alguien con quien me guste pasar el tiempo. Así, bastante simple”. ¡Preparades, listes… ya!