Se hizo conocido por ser el hermano de Natacha Jaitt. Sin embargo, con el tiempo adquirió un lugar en el mundo del espectáculo y hoy tiene su propio programa en radio. Gran entrevistador, y dueño de un cuerpo tallado los 33 años, Ulises Jaitt se animó a posar con poca ropa y revelar sus secretos más íntimos en cuanto al sexo. ¡Conocelo en la intimidad!
“Me encanta el periodismo de espectáculos. Lo disfruto mucho, me apasiona y lo que más me gusta es hacer entrevistas, sacar información y generar polémica, cuando las veo reflejadas en portales o programas. Me gusta como carrera y quiero seguir creciendo”, arranca el musculoso muchacho.
Mientras, Ulises Jaitt revela los secretos de su cuerazo y en el sexo: “Me cuido en la semana, soy de comer pollo, más que nada proteínas. Y el finde es de permitidos. Tengo esa conducta. Tomo agua en la semana, pocos carbohidratos, cero grasas, cero azúcar”.
–¿Cuál considerás que es tu arma de seducción infalible?
–Me elogian mucho la mirada, dicen que es atractiva. De una mujer me atrae la sonrisa. Ahora estoy soltero. Me cuesta enamorarme, pero ojalá aparezca el amor de mi vida.
–En tus reportajes siempre preguntás por las vayainas de Moria, todas mujeres bonitas que la acompañan en Incorrectas… ¿con cuál tendrías sexo?
–Me queda elegir entre las solteras, por una cuestión de que es más lindo y educado, antes que una de las que están en pareja. Así que… ¡Silvina Luna!
–¿Cuál es tu posición preferida en la cama?
–Me gusta la mujer en cuatro. ¿Si vale todo? Entre cuatro paredes, con tu pareja, claro. Vale todo lo que a los dos les guste hacer. Es como un acuerdo. El sexo oral es clave, tiene que estar sí o sí de ambos lados. La previa es muy importante. Disfruto mucho verle la cara a la mujer cuando me está practicando sexo oral, y el placer que se siente al ver eso.
–¿Estuviste con algún hombre?
–Nunca tuve relaciones con un hombre, pero sí me ofrecen plata para estar conmigo. De hecho, Ricardo Fort en su momento me ofreció de todo, quería que fuera su pareja. Muchos famosos del ambiente me escriben.
–¿Cómo sobrellevás la pérdida de tu hermana?
–No lo puedo creer, siento que es una pesadilla de la que algún día voy a despertar. Es algo terrible. Vivo con mis sobrinos. La causa está congelada, no pasa nada ni nunca citaron a indagatoria. Hubo delitos de todo tipo, pero la Justicia en la provincia de Buenos Aires no vio nada.
-¿Y ahora?
-Cuando pasó lo de mi hermana, las primeras semanas pensé en suicidarme, en quitarme la vida. Se me cruzó por la cabeza emborracharme hasta explotar. Después lo pensé muy bien, le vi la cara a mi sobrino y me di cuenta de que él no se merece otra pérdida, porque ya perdió al papá y a la mamá. Natacha hubiese querido que yo cuide a su hijo de la mejor manera. Quedó ahí, decidí trabajar y darle para adelante.
