El martes 26 de marzo la casa de Gran Hermano estuvo bastante revolucionada por distintos acontecimientos que se fueron dando a lo largo del día. Y si bien no tiene que ver directamente con Juliana Scaglione, una vez más Furia termina en el centro de la polémica.
Siendo que la administración del presupuesto y la organización de la comida ha sido siempre un tema de conflicto en el reality, esta edición no fue la excepción. Por el contrario, hasta Virginia Demo, que durante la estadía intenta mantener la calma, se desbordó al ver que no estaban cumpliendo con el menú pautado para ese mediodía.
El punto de conflicto se dio cuando la standapera entró a la cocina y se encontró con Mauro, uno de los nuevos en la casa, pelando papas. ¡Y, al parecer, no era la minuta acordada! Indignada y a los gritos, la artista le recriminó: “¡Por qué van a hacer papas al final y batatas? Si Alfa iba a hacer el arroz gratinado”.
“¡Quién decidió? ¡Quién dijo que hagan papas y batatas?”, siguió la mujer. A lo que el musculoso y flamante hermanito se defendió: “Yo. Bueno, listo. Lo guardamos”. Enojada y despotricando, Virginia abandonó la escena y se fue al jardín de la casa donde estaban el resto de los participantes.
VIRGINIA EXPLOTO Y APUNTO CONTRA FURIA
Pero mientras salía al parque, a viva voz, acotó: “Ya está. Háganlo, caguensé. Pasa todo así. Resulta que deciden lo que comemos uno. Me cago de risa”. Al escucharla y ver el portazo que dio, sus compañeros sorprendidos le preguntaron qué estaba paseando.
“Nada. Iba a hacer el arroz gratinado y se pusieron a hacer papas y batatas porque Mauro quiere comer papas y batatas. Ahora parece que decide él lo que comemos todos. Ahora falta que porque un pendejo está con alguien que… parece que tiene que decidir todo”, arremetió Virginia en tanto se metía a la pileta para sacarse el berrinche.
Al escuchar, Furia, dándose por aludida, la increpó: “¿Qué fue ese comentario Virginia? Terminalo. ¿Está con alguien que qué? Que el supuestamente esté conmigo porque pensás que tengo influencia, acá todos deciden la comida que quieren ”. A lo que Demo remató: “Que tenés influencia en la casa y todo el mundo tiene miedo de decirle que no”.
