A tres semanas del arranque del reality, Gran Hermano está que arde y las estrategias de sus participantes empiezan a quedar al descubierto para los demás, jugándoles en contra. Eso fue lo que le pasó a Daniela Celis, una de las "hermanitas" nominadas para la próxima gala de eliminación.
Todo empezó cuando Romina, la líder de la semana, que goza de inmunidad, descubrió que la chica de Moreno “llevaba y traía información” entre el resto de las chicas. Dispuesta a pararle el carro, la ex diputada nacional habló con Lucila "La Tora" y Julieta Poggio para advertirles sobre los manejos.
"Ella va y te habla mal de mí. Viene y me habla mal de vos. Va a otra y le habla mal de otra más, y así. Ahora se pone a llorar porque dice que hablamos de ella, pero está jugando el papel de víctima. Es muy mentirosa", aseguró Romina.
"Y vos tenés cuidado. Yo sé que te encariñaste un montón, pero que no te llene la cabeza", le dijo a Julieta, una de las más cercanas a Daniela. Luego, mientras la morocha lloraba en la habitación, se defendió de las acusaciones ante Poggio: “Ella tiene el culo sucio, por eso se la agarra conmigo”.
"No le confiemos más nada, es una embrollera”, es la versión que instaló Romina con la que, parece, convenció al resto y que llevó a Celis a ser una de las nominadas para el próximo domingo, al igual que Agustín, Mora, Juan y Alfa.
