“Por ahora prefiero el silencio. Nuestro objetivo es conocer la verdad y confiamos en que pronto tengamos el informe oficial”, con estas palabras Quique Sacco se disculpaba con Paparazzi por preferir no hablar y esperar los tiempos de la justicia. Pero un día después se conoció el informe oficial que explicó qué le ocurrió a su esposa, la periodista Débora Pérez Volpin, el día en que falleció en un quirófano del Sanatorio La Trinidad de Palermo.
Entonces, él y el abogado de la familia, el doctor Diego Pirota, brindaron una conferencia de prensa en la Legislatura porteña. El letrado se refirió puntualmente a la responsabilidad de la clínica en el desenlace fatal y apuntó contra la actuación del juez Gabriel Ghirlanda, quien hasta el martes intervino en la causa.
"El Juez sabe qué hizo mal. Buscamos que sus falencias queden minimizadas ante la contundencia del informe. Las dificultades con el Juez tuvieron que ver con muchas pruebas que se tuvieron que hacer y no se hicieron. Perdimos pruebas", dijo en relación al magistrado.
"La clínica fue otro obstáculo para conocer la verdad. La clínica le mintió a la familia. Sacaron un comunicado de prensa diciendo que murió por un paro cardiorespiratorio. Dieron datos falsos diciendo que Débora tenía una hepatitis. Fuimos a buscar el aparato con el que realizaron la endoscopía. El juez no lo hizo, lo hizo tarde y por eso nos encontramos con un equipo que no filmaba y que nos impidió ver el momento en que le hicieron lo que le hicieron a Débora. Necesitábamos que la clínica nos aporte el listado de todo el personal que intervino. Eso no pasó y nos dieron registros de momentos en los que Débora no estaba. Ante la contundencia del informe todo esto queda más expuesto", explicó.
Además, Pirota leyó parte del informe y fue concluyente: "La causa de la muerte es una perforación instrumental del esófago. No tenía ni una úlcera ni una hepatitis. No se detectaron patologías preexistentes. El edema pulmonar fue la expresión final de la falla cardíaca. La muerte de Débora se trata de una muerte violenta producto del accionar de los dos profesionales".
Enrique Sacco sigue con su idea: que se sepa la verdad.
Debora tuvo una muerta muy fea, según su abogado.
