Dentro de unas semanas, cuando se convierta formalmente en primera dama de la Argentina, la vida de Fabiola Yáñez cambiará para siempre. Las tareas protocolares y el ritmo cotidiano de la mujer del presidente electo, Alberto Fernández segurament– completarán su agenda laboral. Y una sonrisa se instaló en su rostro. Pero no desde el domingo 27 de octubre, día en que la fórmula presidencial Fernández - Fernández se impuso a la de Macri - Pichetto, sino desde algún tiempo antes, cuando la campaña estaba en marcha y cuando el resultado de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) adelantaban este resultado, que desde el 10 diciembre instalará a Alberto, su prometido, en la Casa Rosada.
Así es, Fabiola se convertirá en primera dama, aunque todo parece indicar que no dejará de ser aquella muchacha sencilla que conquistó el corazón del futuro presidente de los argentinos. Sin lugar a dudas, Alberto quedó impactado con su belleza. Pero habría algo mucho más profundo que lo enamoraría: su inteligencia. ¿Y qué la enamora a ella de Alberto? Lo respondió sin vueltas durante una entrevista con la revista ¡Hola!: “Es un hombre muy simple y sensible. Admiro su inteligencia, su capacidad y el temple que tiene para llevar adelante lo que se propone”, dijo.
La carrera política de Fernández y su vínculo con el mundo de la docencia universitaria de derecho civil y penal son bien conocidas. De su vida privada se sabe que desde 2005 está divorciado de Marcela Luchetti, con quien tuvo a su único hijo, Estanislao (24), y que ocupa un departamento en el coqueto barrio de Puerto Madero, prestado por Enrique Pepe Albistur, ex secretario de Medios.
Pero… ¿quién es Fabiola Yáñez?
Quién es la mujer de delicados rasgos y sonrisa amplia que enamoró al próximo presidente? Fabiola nació en Río Negro hace 38 años, en el seno de una familia humilde. Cuestiones laborales de sus padres la llevaron a vivir en las provincias de Misiones y Santa Fe, en la ciudad de Rosario. Hace 15 años se instaló en Buenos Aires para finalizar la licenciatura en periodismo, que completó en la Universidad de Palermo.
Entonces, seguramente, no imaginaba que su vida daría un vuelco inmenso. Tras una charla en la universidad, Fernández le otorgó a Yáñez una entrevista para su tesis, de la que el tema elegido era “La relación interdiscursiva entre el diario Clarín y el primer gobierno de Néstor Kirchner”, con la que obtuvo un 10. Allí intercambiaron teléfonos y volvieron a encontrarse cuando él la invitó a tomar un café, en 2013. Aquel sería el primer encuentro de esta historia de amor.
Aunque conviven desde hace cuatro años, fue en Francia, en 2016, cuando se comprometieron pero sin fijar fecha de casamiento. “Engagé dans París, immensement heureux” (que en español quiere decir: “Comprometida en París, inmensamente feliz”), fue la frase que ella escribió al pie de la foto que muestra dos copas de vino y sus manos. En la de ella se luce un hermoso anillo de compromiso.
Fabiola no tiene hijos, pero admitió que le gustaría tenerlos. “Me gustaría tener hijos, lo hablamos, pero los momentos no se han dado por las ocupaciones”, le confesó a Moria Casán en Incorrectas.
Si bien en su carrera periodística pueden enumerarse trabajos en la cadena CNN y en los programas Común y corriente, por Radio 10, no es sólo el mundo del periodismo donde Fabiola se mueve con soltura. El del arte también lo siente como propio. Es que participó de las obras de teatro ¡Otra vez papá! Después de los 50…, en la que compartió elenco con Manuel Wirtz, y Entretelones, con Fabián Gianola, a quien finalmente denunció en los medios por acoso sexual.
Fabiola y Alberto conviven bajo el mismo techo, sí, pero su unión no está formalizada civilmente. Entonces, muchos se preguntan si la figura de Fabiola podría configurar la de primera dama. Según surge del diario Clarín, nada impide que la mujer de Alberto ocupe ese lugar. “No hay nada legislado. Cada presidente elige qué rol, qué volumen de actividad o visibilidad le da. Suele ser la esposa del jefe de Estado. Y, si no hay un cónyuge, un familiar directo, generalmente son las hijas”. Pero según se detalla nada indica que deba ser un familiar.
A la moda...
Fabiola se presenta como una verdadera embajadora de la moda, atinada y delicada. Tanto para el momento de emitir su voto, como por la noche, en el búnker, eligió modelos en tonos claros y muy elegantes. “Está muy bien vestida, se nota que está asesorada”, dijo Tere del Valle, especialista en fashion. “Fabiola está correcta volviendo a elegir los colores claros como en anteriores oportunidades”, agregó su colega Gabriela Gurmendi. Por estas horas, su nombre se replica en todos los medios. Diarios, revistas y sitios web hablan de ella: la nueva primera dama, que acompañará la gestión del nuevo presidente.
