En los últimos tiempos, las hijas de Jorge Rial fueron noticia por diferentes razones. Mientras Morena iba y venía con Facundo Ambrosioni, el padre de su hijo Francesco, e inclusive confrontaba con el periodista por diferencias propias del vínculo, junto al creador de Intrusos estaba la incondicional de él: Rocío.
En ella se apoyó para sobrellevar una etapa delicada de su vida, principalmente cuando advirtió que Morena se iba aliando a gente casi enemistada con él, con la idea de corporativizar. Fue entonces cuando en la figura de “La Chini”, como él mismo la llama, comenzó a desarrollar un rol decisión, para dialogar a corazón abierto con su hermana y mediar entre ambas parte, conteniendo también a Jorge y actuando como uno de sus pilares a la hora apuntalarlo anímicamente.
Los meses fueron fueron transcurriendo y paulatinamente la relación entre Jorge y Rocío fue recobrando su cauce normal, al punto de reconciliarse y decidir reiniciar todo de cero, como si nada hubiese ocurrido. En esa determinación de dar vuelta la página, justamente, Rocío tuvo mucho que ver. “Ella es así, es rebelde, va con los pantalones adidas”, contó orgulloso Rial cuando se refirió a las críticas que recibió la joven por asistir a un evento vestida con un jogging y zapatos.
Ahora Rocío también marcó la cancha y se atrevió a implementar un radical cambio de look, abandonando el pelo lacio y animándose a las ya conocidas “trencitas”, en toda su cabeza.
Y no solamente eso, también “peló” un jugado escote en la misma foto que subió a las redes sociales en compañía de dos amigos. Evidentemente, Rocío transita épocas de cambio y va por todo. Los que estén en desacuerdo, que salgan de a uno.
