Benjamín Vicuña quedó relacionado a un nuevo escándalo tras la explosiva confesión de Pampita. Su ex pareja dio a entender que él estuvo junto a una reconocida y muy querida actriz, de la cual a la horas se descubriría que se trata de Natalia Oreiro.
Esta polémica había quedado en el pasado dado que sólo fueron algunos rumores, pero Carolina Ardohain terminó de confirmarlos. Apuntando directamente contra la uruguaya, no dio su nombre pero sí dio algunos detalles certeros.
El hecho de asegurar de que existe una actriz con la que no trabajaría y que a su vez le quedó algo pendiente por decirle, fue clave para adivinar de quién se trataba. Lo más explosivo de esto, llegaría luego de que en Socios del Espectáculo revelaran cómo hizo Pampita para descubrir su affaire.
“Ella le encontró el mensaje de texto mientras él hacía un asado; le había agarrado el teléfono porque él tenía las manos llenas de carbón. El mensaje aparentemente era de Natalia Oreiro. Han volado las chispas por todos lados y el asado quedó calcinado”, destacó Rodrigo Lussich.
Recordando que esto ocurrió durante 2015, que es cuando Vicuña y Oreiro fueron compañeros en la novela Entre Caníbales, esa fue una de las crisis más grandes que tuvieron Pampita y su ex. De hecho, se decía que Natalia venía mal con Ricardo Mollo, su actual pareja.
Si bien nunca existió una confirmación oficial, con lo que dijo Carolina está más que claro que existió una actitud por parte de la actriz que le molestó. En un tema del cual se están revelando cada vez nuevos detalles, Benjamín no logra salir del ojo de la tormenta.
“No solo se hablaba de la crisis de Pampita sino que también de la crisis de Oreiro con Mollo, es más, se decía que se habían separado”, concluyó Nancy Duré. En un informe que dejó muy mal parados a ambos actores, habrá que ver si esto toma alguna repercusión con Natalia.
La uruguaya no es de involucrarse en conflictos de esta índole. Incluso se llegó a decir que Oreiro muchas veces evitó a asistir a diferentes eventos donde se encontraba Pampita, por el simple motivo de querer evitar un escándalo mayúsculo.
