A tres meses de un Mundial no se puede dudar: es a todo o nada, ahora o nunca, ganar o perder, matar o morir, la gloria o Devoto. El que pestañea, fue. Se queda afuera, se lo pierde, lo mira por la tele. La Copa no es para los tímidos, los de medias tintas o los indecisos. La Copa es para los audaces, los arriesgados y los decididos. Bueno, a sólo 90 días de Qatar, Tini Stoessel sembró una duda enorme en el corazón de Rodrigo De Paul, uno de los baluartes de la Scaloneta argentina. Ella no sabe si está enamorada de él. ¿Y ahora, quién podrá defendernos?
Mientras su novio se encuentra en Madrid, España, porque allá se gana la vida como futbolista del Atlético que dirige otro argentino, el Cholo Diego Simeone, la cantante asistió a la ceremonia de entrega de los premios Gardel, el máximo galardón que otorga la industria de la música de nuestro país.
Estaba, como en cada ocasión, de "punta en blanco". Si hay algo en lo que todos coinciden en cuanto a Tini es en su elegancia y su "oportunismo" para elegir los atuendos ajustados a cada situación o a cada compromiso. Si anda por la calle, su estilo urbano" se destaca rápidamente. En una gala como la de ayer sus vestidos largos y en general sobrios y a la vez distinguidos también escuchan aplauso, medalla y beso.
En la "alfombra roja", ese americanismo que las fiestas criollas le copiaron a las yanquis, Tini fue entrevistado por Lizardo Ponce, que de esa forma concretó su regreso a las grandes ligas televisivas. Sobre el final de la charla, el periodista cordobés fue directo al grano y abandonó las cuestiones artísticas, esas que sólo les interesan a los cantantes. La gente, en cambio, quiere saber todo de sus ídolos.
Sin vueltas ni largos preámbulos, Lizardo le preguntó a Tini si estaba enamorada. Obviamente, de Rodrigo de Paul. Entonces llegó la inesperada y poco convincente respuesta que hizo correr un sudor frío por la espalda de todos los futboleros que esperan cortar en tierra de jeques, camellos y petrodólares la sequía de 36 años sin levantar el máximo trofeo.
"Oh, qué palabra" dijo Tini entre sorprendida y desacomodada. "Qué palabra fuerte que te tiró yo al final de la nota", se atajó Lizardo. Y ella volvió a tomar el mando de la charla. "Sí, eh..... Estoy....muy bien.... estoy contenta.... Estoy....disfrutando". Cuando a los fanáticos se les llenaba el arco propio de preguntas, la cantante fue un poco más "vehemente", por decirlo de alguna manera. "Eh..... A Rodrigo lo quiero con todo mi corazón. Justo vengo de Madrid, aparte, pasamos unos días allá...Entonces en ese sentido estoy re contenta y...Rodri es lo máximo, le está yendo increíble en todo lo que hace así que nos acompañamos re bien". Y sí: hasta un contador o un abogado hubieran sido más contundentes y afectuosos.
