Mauro Icardi está entregado, envuelto para regalo y feliz de la vida tras haber superado la escandalosísima crisis de pareja que casi termina con su matrimonio de siete años con Wanda Nara, su esposa, representante y mamá de sus dos hijas, Francesca e Isabella.
Después de pasar más de una semana llorando por los rincones de su mansión de París, sin ir a los entrenamientos del PSG y a puro manotazo desesperado para conseguir el perdón de Wanda, Mauro al fin respira tranquilo.
Y como parte de esta vuelta a la armonía familiar, tras la reconciliación el deportista decidió hacer un importante cambio en su foto de perfil de Instagram, esa ventanita indiscreta a la vida de otras mujeres que tantos dolores de cabeza le causó a causa de sus pícaros “likes” que lo llevaron al derrape por chat con la China Suárez.
“Abrazame fuerte, y no me sueltes nunca”, dice Icardi en la foto junto a Wanda, la postal que eligió para reemplazar la aburrida que tenía con sus iniciales. Con este gesto, el jugador dejó en claro que su foco, al menos en lo que hace a la vida virtual, está puesto en una única dama: su señora esposa, la “mamucha” de sus nenas.
Pero además de esta iniciativa contundente, que es marca de su intención de hacer “buena letra” con la blonda, Mauro se animó, de a poco, a seguir otras cuentas de Instagram. Empezó con su suegra, Nora Colosimo, siguió con su cuñada Zaira y, luego, sumó a sus compañeros del Paris Saint Germain y demás figuras del deporte.
Sí, señores y señoras, sin embargo, lo más importante, lo que todos estaban esperando, ansiando, desvelados: ¡Mauro volvió a seguir a Leo Messi! Ahora sí, la casa está en orden.
