Córdoba es una provincia que a lo largo de su historia se destacó por la aparición de incontables y talentosos artistas que aportaron su huella a la cultura Argentina. Y en el mundo de la música, la leyenda del cuarteto que sigue más vigente que nunca es La Mona Jiménez.
Juan Carlos Jiménez Rufino a sus 73 años continúa haciendo delirar a todos sus fanáticos al ritmo del tunga tunga y cada baile que realiza es una fiesta total. Con más de 90 discos grabados, La Mona trascendió en todos los corazones de público.
Amado por sus fans y admirado por sus colegas, en su queridísima Córdoba tiene un museo espectacular. Mediante una entrevista que hicieron en Intrusos, mostraron el interior del lugar y cada una de las particularidades que tiene el cantante.
“Subiendo al primer piso tenes todas las botas, la exhibición de los premios. La entrada es espectacular. Aquí antiguamente había un bar y ahora está el de él. Con esto te morís, mirá sus trajes. De los 8.000 trajes que tuvo, nunca repitió uno solo”, comentó Pablo Layus.
DEVOCIÓN ABSOLUTA POR LA MONA JIMÉNEZ
Ante la admiración que le generaba a Florencia de la V poder ver semejantes reliquias, todos quedaron anonadados: “Es nuestro Elvis”. Siendo una especie de santuario y a donde la gente puede ir a disfrutar, pasar un buen momento, comer o tomar un aperitivo, el sitio es una maravilla de principio a fin.
“Hay pantallas gigantes. Está ubicado en el barrio Cerro de las Rosas, uno de los más caros de Córdoba. La Mona vive a unas 15 cuadras de acá. Es hermoso tiene los 12 Premios Gardel. Tiene una pantalla a donde buscar tu barrio y te hace la seña. Es espectacular”, comentó el periodista.
Ya en un mano a mano con Flor de la V, La Mona reveló cómo cambió su ritmo de vida este último tiempo en pos de poder preservar a su salud: “Estoy orgulloso de mi museo. Sufrí mucho la marginación por ser cuartetero. Ahora me voy a cuidar más para tener menos shows; un baile por mes así disfruto más de mi familia, de mis hijos y de mis nietos”.
