Era apenas un nene y empezó a recorrer los pasillos y esperar su turno para los castings. Y después de participar en varias publicidades, a Balthazar Murillo (15) se le dio la primera oportunidad en ficción en Lulú, película de Luis Ortega. Pero la popularidad llegó ahora de la mano de Apache. Allí, entre recursos estéticos, semejanza gestual y una dedicada interpretación, se puso en la piel del futbolista Carlos Tévez y protagonizó una de las series del año.
El menor de tres hermanos, alumno responsable y amante del fútbol, arranca reconociendo: “Siempre fui tímido, de chico y ahora. Nunca fui un cancherito, eso está lejos de mí. Mi familia siempre me dijo y me dice que hay que conservar la esencia, es lo que me enseñaron. Y el bajo perfil también. Mi familia y yo estamos re contentos con todo lo que me viene pasando: con haber sido parte de la serie y con su repercusión”.
Además dice destacando, con notable tranquilidad, a pesar de la revolución que podría significar para su edad y su adolescencia semejante nivel de aceptación popular. “Apache me la vi completa en un día. No soy de ver lo que hago, es algo que no me gusta pero necesitaba saber cómo había quedado todo. Y una de las cosas que más me gustaron fue que nos lucimos todos los actores, desde el primero hasta el último, que otros personajes se hayan destacado”.
–¿Por qué no te gusta verte?
–No me gusta verme ni escucharme tampoco. Soy muy crítico conmigo. Pero soy consciente de que es algo necesario.
–¿Cómo fue la repercusión en el cole, ahora sos más popular?
–Hay compañeros que vieron la serie y me felicitaron, pero no cambió en nada porque son los chicos que veo todos los días. Tal vez se sorprendió alguno que otro de otros cursos, pero del mío no, porque saben que me dedico a esto. Sí me escribieron muchos famosos por redes para felicitarme y, algunos youtubers también.
–¿Tenés decidido que querés ser actor?
–Hago publicidades desde los seis años y participé en otras películas. Si bien este fue un protagónico, siempre tuve el foco puesto en que quiero ser actor.
–Venís de un protagónico, ¿ahora harías un personaje más chico?
–No tendría ningún problema en hacer personajes chicos. Me gustaría ponerme en la piel de un pibe malo. Hasta ahora vengo haciendo a chicos buenos pero querría verme de la otra forma. Por ahora estoy a la espera de nuevas propuestas, me sirve como relax y, como te dije, para dedicarme al cole. Para fin de año es que siempre surgen las nuevas posibilidades.
–¿A la escuela le das bola?
–Ahora que terminé con las grabaciones estoy ciento por ciento pendiente del colegio. Pero siempre me considero un buen alumno. Soy un alumno más y me gusta que así sea. Quiero terminar el cole. Por el título y por si, el día de mañana, me quiero dedicar a otra cosa. Lo que sí, no tengo problema en estudiar en el colegio, lo que no me gusta es hacer tareas o estudiar en casa.
–¿Tenés novia?
–No, no tengo novia.
–Quizá, la historia de amor se concreta con la actriz que interpretó a Vanesa, la mujer de Tévez. Entre ustedes hay muy buena onda…
–Sí, nos llevamos muy bien porque nos conocemos hace tiempo, de los castings. Esto es trabajo. Por ahora, no hay amor entre nosotros.
–¿Vos habías tenido novia o tu primer beso fue con ella, en la ficción?
–Mi primer beso fue con ella en la ficción.
–Jugabas al fútbol en el club Comunicaciones, ¿querías ser deportista?
–Soy de Independiente, jugaba al fútbol pero me lesioné. Incluso, el día que hice el casting para Apache estaba con bota en el pie y me la saqué antes de entrar para que no se notara lo que me había pasado. Hoy juego pero con amigos nada más. De chiquito lo tomaba en serio, pero no quiero ser jugador de fútbol. La verdad es que gusta atajar más que correr por el campo.
–Después de interpretar a Tévez, ¿pensaste en hacerte de Boca?
–Tévez se destacó en varios clubes, lo admiro como jugador, pero soy de Independiente.
