Así como fueron Alfa en un momento, Agustín después y Romina, Julieta y Daniela en las últimas semanas, ahora es Coti la que está en el centro de la escena de manera permanente y se roba toda la atención de Gran Hermano. La correntina revisó los cajones de Marcos sin pudor alguno y un par de compañeros se lo reprocharon. Sobre todo Thiago, que se hizo muy amigo del salteño y la acusó de ladrona.
Por estas horas, Coti es la gran figura de la Casa. Todo lo que hace y dice cobra gran relevancia tanto adentro como afuera de la competencia que tiene en vilo a la patria televisiva. Hace unos 15 días, la espontánea que les clavó a Daniela y a Julieta -y que además de mandarlas a placa hizo que "Pestañela" abandonara el juego- la convirtió en una estratega pero al mismo tiempo la puso en un extraño lugar de odiada por sus rivales y por buena parte de los fanáticos.
La gente sabía de su arriesgada movida. Sus compañeras no, hasta que alguien que pasaba por las cercanías de la Casa lo gritó, adentro la escucharon y todos supieron de qué iba la cosa. Las chicas encararon a Coti y directamente la acusaron de "traidora".
Tanto es así que Daniela, una vez eliminada pero como gran favorita a volver en el repechaje, prometió "ir por Coti" antes que por Thiago, el "novio" que la "dejó tirada".
Esa situación alteró las cosas al interior de la vivienda que cada noche concita el interés y la atención de entre 2 y 2 millones y medio de personas solo en el ámbito metropolitano. Coti, hasta entonces aliada de las chicas, pasó a ser su peor enemiga. Para colmo, "El Cone" se dio cuenta y le puso paños fríos a la volcánica relación que mantiene con la correntina, que de esa manera se quedó sola.
En medio de esa situación, Coti no sólo no se echó para atrás, sino que decidió multiplicar su "estrategia" y al manos de la boca para afuera declaró sentirse cómoda "potenciada" como "la mala" de la Casa. Así las cosas, entró "a la habitación de los chicos" y se puso a revisar los cajones de Marcos, que en ese momento no estaba en la pieza. Se encontraban Ariel y Thiago, que en la última semanas fortaleció su vínculo con el "primo".
Coti estaba "desesperada" por ingerir algún alimento o alguna golosina y lo que encontró en la mesita de luz del salteño le pareció "agua en el desierto": unas galletitas y un chocolate. Pero su alegría chocó con el fuerte reproche de Thiago, que no le dejó pasar la osadía de meter las manos entre pertenencias que no eran suyas.
"Está mal lo que estás haciendo, no podés, es un error. Yo no lo haría. Me parece pésimo", le puso los puntos mientras Ariel prefería destacar que el "primo" es "un fenómeno que pudo guardarse eso dos semanas". ¿Coti? No, ella no le llevó el apunte a Thiago. "Vos hacé lo que quieras pero no me digas lo que tengo que hacer porque yo no le doy explicaciones a nadie de mis actos", le tiró. Está con las "corrientes" alteradas parece.
