Wanda Nara llegó hace unos días a la Argentina y se encuentra compartiendo con su familia. Este miércoles subió una tierna postal en su Instagram recordando la primera infancia de sus hijos Constantino y Valentino, en donde se los ve manejando un auto Mini Cooper azul de juguete.
“Mis muñecos de verdad. Coki y Valentino, esta dupla me volvía loca. Qué suerte que yo tenía 22… Y hoy con 35 tengo dos preadolescentes que me matan de amor”.
Enseguida la mamá de Wanda, Nora Colosimo, le envió un mensaje planteándole que había hecho mal las cuentas y que en el momento de la foto no tenía 22 años.
“Wan no tenías 22! Valu ahí tiene como 4. Eras más grande, hacé bien las matemáticas”, le dijo con un emoji sonriente.
La empresaria le respondió que lo que quiso decir es que su hijo mayor nació cuando ella tenía 22 años. Y mediante una captura de pantalla compartió el intercambio. A la foto le sumó este comentario: “Siempre stalker mi mamá”.
La dura crítica que recibió Wanda
Wanda Nara presentó su línea de cosmética en el país y más allá de recibir críticas por el escaso catering que ofreció, revelaron otros secretos del evento que la lanzó como empresaria en Argentina. En Mananísima, el programa de Carmen Barbieri por Ciudad Magazine, fue Pampito quien le dedicó duras definiciones a Wanda.
“Wanda inauguró su local maquillaje en el Abasto que estaba lleno de gente. Los periodistas que asistieron me dijeron que el shopping estaba revolucionado”, arrancó Sebastián Perello. “Hay que ver si hay que pagar una entrada para verla si la rompe. Era una estrella pop. La gente desesperada que quería a Wanda, que quería a Wanda… Tres partes tenía el evento”, contó Pampito.
“Primero, había como una conferencia de prensa que era la primera conferencia de prensa de la historia donde los periodistas no podían preguntar. Ella estaba sentada con una chica que organizaba todo el evento, que fue la que invitó a todos los periodistas”, dijo Sebastián.
“¿A qué voy a ir? A hablar de maquillaje voy a ir. ¿Acá hablamos de maquillaje en este programa? No dio notas. Escuchá lo que te digo… Era la única conferencia de prensa de la historia que los periodistas no podían preguntar”, destacó Pampito. “Era ir para escucharla hablar a ella de maquillaje, de como los había ideado. Las preguntas había que mandarlas por mail con anticipación y no se podía hablar de otra cosa que no fuera de maquillaje”, compartió Sebastián.
