El dolor de Panam por la muerte de Daniel Comba – Revista Paparazzi

El dolor de Panam por la muerte de su productor: "Lo sufro como si se hubiera ido un familiar"

La animadora infantil recordó al hombre de negocios, quien falleció tras permanecer 10 días internado tras dar positivo de Covid.
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La muerte del productor teatral Daniel Comba conmocionó al ambiente artístico. Un poco porque no se conocía que estaba internado hacía 10 días tras dar positivo de covid, pero sobre todo porque se trataba de uno de los hombres más respetados y queridos de la farándula.

Laura Panam Franco lo conocía muy bien. Quizás como nadie. En Intrusos, donde salió al aire minutos después de conocerse la infausta noticia, admitió que estaba "Muy muy shockeada. Daniel fue una persona super generosa desde que empecé en la tele. Me vino a buscar a la marmolería de mi familia hace 26 años. Yo tenía 20. Así que imagínense si nos conocíamos".

"Fue una persona generosa, honesta, un productor con todas las letras. Una persona creyente, solidaria, admirable. Siempre estaba ayudando. Todo el mundo que trabajo con él y tuvo alguna relación sabe cómo fue. Sabe que ante todo era super honesto" detalló la animadora infantil.

Efectivamente, Comba era muy creyente: en su perfil de Whastapp, por ejemplo, tenía una foto de Jesucristo. Reconocido simpatizante de Vélez Sarsfield, Comba fue muy amigo de Jorge Guinzburg -otro fanático del cuadro de Liniers- y de Carlos Bianchi, uno de los más grandes ídolos de la entidad.

DANIEL COMBA CON CARLITOS BALA

"Le quiero mandar un beso a la mamá, que era la debilidad de él. Su amor de la vida. Y a su hermana y a todos sus amigos. El perdió al papá de chiquito, entonces salió a trabajar a los 10 u 11 años y tenía debilidad por la madre. El se reinventó siempre por ella" siguió Panam.

Sin perder el tono compungido, dijo "Lo lamento on todo mi corazón. Daniel era una persona que adoraba, respetaba, era familia nuestra. Sucedió todo en 9 o 10 días, y tenía tan bajo perfil que pocos lo sabían. Era un hombre sano, no tomaba, no se drogaba, era super correcto. Estaba muy cerca de él su secretaria".

EN VEZ DE DARSE UN APRETON DE MANOS, DANIEL COMBA Y CARLOS ROTTEMBERG SELLABAN SUS ACUERDOS CHOCANDO SUS PULGARES.

"Creo que fui parte de su círculo íntimo. Nos cuidaba como hermanos. Hay que recordarlo de la mejor manera. No tenía hijos. Siempre quería que todos lo pasaran bien. Era una persona muy contenedora. La gente que trabajó con él sabe como era, y cómo estamos de tristes" lamentó la rubia.

Sobre el final, reconoció que "Fue un hombre muy honesto, intachable, creyente de Jesús. El me regaló la primera imagen que tengo de Jesús, y todavía la llevo conmigo. Diría que estoy perdiendo un familiar".

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