Descomunal, incontrolable e incluso imposible de medir. La repercusión de Gran Hermano sacude con todo a su paso, derrumba mitos y ratifica que ese formato añejo continúa más vigente que nunca, con unas mediciones infernales. En todo ese presente, Marina Calabró analizó las posibles consecuencias que podría sufrir Santiago del Moro.
La periodista dispone en su haber un extremo conocimiento de los rasgos personales, y profesionales, del conductor del reality. Por eso, se erige en una voz autorizada para analizar las derivaciones que podrían manifestarse en el interior del animador por esta titánica notoriedad.
En su visita al piso de América, en un ciclo sabatino de Guido Záffora, Marina no dudó en mirar directamente a la cámara y hablarle, figurativamente claro está, a Santiago con un consejo muy filoso. "El único riesgo que corre es el 'endivarse'”, exclamó en el aire.
Para tratar de especificar su concepto, Calabró añadió más sustento de su pensamiento sobre Santiago: “Lo voy a dejar ahí, que no se endive, porque sería un pena porque es un pibe recontra humilde". Una manera de gritarle que no se le suba la espuma de la fama.
Luego analizó las posibilidades de continuar con su personalidad normal y focalizó en su mujer: "Yo creo que María -su esposa-, su familia, son un cable a tierra... sino ya estaría sabés dónde (hace gesto con la mano hacia el cielo) subido".
Y para concluir con todo este descargo contra del Moro, Marina no escatimó en valorarlo como persona: "Que no pierda esa humildad, esa cosa de Tres Algarrobos que me parece que es parte de su capital profesional".
