Érica Rivas decidió dar un giro, un viraje en su imagen, tal vez motorizada en renovar energías o simplemente por el hecho de desear una nueva apariencia.
La actriz no anduvo con nimiedades, ya que optó por un modificar radicalmente su color de cabellera, una metamorfosis divina y se inclinó por un tono muy disímil a los tradicionales, nada de rubio, nada de colorado, ni de morocho.
Érica se prestó a las manos creativas de su estilista y se dejó seducir por aceptar teñirse completamente de azul, en esta técnica tan en boga, que se enrola en los colores fantasía.
Claro que el proceso moderno incluyó una especie de intercalado entre mechas azuladas y su matiz natural de castaño, lo que trajo como resultado un efecto maravilloso, que ella lució muy alegre y contenta.
Rápidamente, Rivas decidió compartir con sus seguidores esta novedad y reposteó en su cuenta de Instagram la imagen que publicó su peluquero. Y le agregó un comentario que describe sus sensaciones: “Lookazo, una escultura capilar. ¡Genio!”.
Inmediatamente los internautas aplaudieron esta decisión de Érica y la llenaron de elogios por su melena nueva, por esa osadía de animarse a jugar con un tinte diferente.
