Listo, ya no hay misterios, se terminó la etapa de las especulaciones, de las persecuciones para encontrarlos in fraganti. Lejos de las presunciones, la China Suárez y Rusherking rompieron el molde del ostracismo y salieron a gritarle al mundo que se aman, que se eligieron mutuamente.
Tras meses álgidos, de sacudidas constantes, María Eugenia parece que se topó con las sensaciones más hermosas, esas que se reflejan con las mariposas en la panza con el jovencísimo cantante. Atrás quedaron su affaire escandaloso con Mauro Icardi y su relación a distancia con el español Armando Mena Navareño.
Ahora, la China focalizó su energía en el ex novio de María Becerra, el mismo al que llevó a una fiesta repleta de famosos pos Martín Fierro y con el que la filmaron saliendo de un hotel de Recoleta, esta semana. La ex de Benjamín Vicuña nada por las aguas del embelesamiento con el trapero.
Como si todas estas pistas no fuesen suficientes, Rusherking rompió el silencio en PH y se lanzó a contar todo lo que vibra en sus tripas por Suárez. “Estoy muy enamorado y muy bien con alguien. De verdad hace mucho que no me pasaba sentirme así”, contó en el ciclo de Andy Kusnetzoff.
Hasta que le puso nombre propio: “La China me dice Thomy”. Y luego narró el instante en que nació el noviazgo: “Nos conocimos en una fiesta, nos estuvimos mirando toda la noche, y no sabía si acercarme o no. A mí no me gusta sobrepasar nada, pero ya habíamos chateado antes”.
Decidido a jugarse a fondo, el santiagueño gritó: “Nos estamos conociendo y estoy disfrutando de ese proceso, estoy muy enamorado”. Listo. Y ante semejante declaración pública, la China también realizó su movida en el tablero y subió una foto en su Instagram.
La manera de confirmar todo esto de María Eugenia fue una imagen de los dos abrazados, con un gesto romántico, en la que se entrelazan bajo el influjo del amor.
