Los últimos años le han provisto a Esteban Lamothe (42) una continuidad laboral realmente ininterrumpida. Si no es convocado para protagonizar ficciones televisivas en horarios centrales, la posibilidad de trabajar le surgen del ámbito del cine o de las distintas plataformas de streaming, un género que en la actualidad, sobre todo en épocas de cuarentena, viene sumando público en grandes cantidades.
La versatilidad del actor suele funcionar como un imán para los productores, que rápidamente piensan en él cuando van detrás de la interpretación de un determinado personaje. Así como Lamothe es capaz de desempeñarse como un galán de estilo urbano, también puede brillar encarnando a un barrabrava, rol que le asignaron en Puerta 7, la última serie de Adrián Caetano para Netflix.
“Me tocó darle vida a un chabón que en la mañana puede torturar a alguien y a la tarde puede tener un gesto de cariño real con un pibito al que está tratando de ayudar, aunque sea a su manera. Esa dualidad me parecía lo más interesante”, remarcó Lamothe cuando se refirió a la serie del prestigioso guionista uruguayo.
“¿En quién me inspiro? Para las escenas de acción me inspiro en Bruce Willis. Él es el número uno total. A mí me encanta. Todos sus gestos y movimientos son una convención cinematográfica de cómo se debe interpretar ese género. Se cae el mundo con bombas, incendios y muertes y él está ahí, inconmovible y como si nada pasara”, continuó el galán.
Sin formar parte de los denominados “carilindos” del ámbito del show ni proponerse canalizar su trabajo a través de la prensa, Lamothe, desde que se destacó en Educando a Nina e inclusive fue nombrado entre los “preferidos” de Griselda Siciliani, la protagonista femenina de la comedia de Telefe, no paró de crecer en ningún sentido.
"Katja, mi novia, no mira mucho Twitter ni Instagram. Y si lo viera supongo que se cagaría de risa de lo que escriben. Ella es una fenómena", dice Esteban.
Y esa evolución se fue dando en paralelo, tanto en lo que respecta al reconocimiento de sus pares como a lo vinculado a las mujeres, pues, sin la necesidad de matarse en un un gimnasio ni “vivir en pose”, Esteban tiene una gran platea femenina. “Siempre me pongo contento cuando me dicen que estoy lindo. Y en las redes me pasa mucho. Katja (la novia) no mira mucho Twitter ni Instagram. Y si lo viera supongo que se cagaría de risa. Ella es una fenómena”, confesó en declaraciones a Agarrate Catalina.
Justamente, Esteban también habló de la violencia de género y de la lucha de las mujeres por terminar con el maltrato: “No soy extremadamente feminista, pero soy uno de los que más apoya la lucha de las mujeres. A ver: en el mundo debería haber igualdad como propone el feminismo. Las mujeres cobran menos, son violadas, sufren violencia. Y eso está mal. Ojalá el mundo, que es machista y patriarcal, aprenda y vaya hacia a un giro. No es una postura, es lo que siento. ¿Cómo fue trabajar con Calu Rivero? La traté con el mismo respeto, cariño y el deseo de interpretar que tengo con todos mis compañeros. Cuando hay escenas de sexo o de besos se habla, se charla. Todo se conversa. Ella venía de una experiencia diabólica. El abuso en el ámbito del trabajo es diabólico”.
