Llegó a pesar casi 140 kilos. Gastón Marote estuve al límite de un serio problema de salud hasta que un pico de presión lo incentivó a un profundo cambio de vida. Hoy, el panelista de Nosotros a la mañana, en El Trece, perdió 54 kilos y logró estabilizar su salud. A base de esfuerzo, constancia, alimentación sana y ejercicios físicos, el periodista cambió su estética en un año. Y ahora Gastón disfruta de un antes y un después en su vida.
“Me propuse llegar al peso de 85 kilos y estoy en 86 pero creo que voy a dejar acá. Hoy pudo comer un plato de ravioles, dulce de leche, crema, alcohol, lo que quiera, y mañana volver a cuidarme alimentándome con verduras, carnes blancas, frutos secos o frutas”, comenzó Marote.
“Tenía Apnea y me dormía en cualquier lado. Podía dormir diez horas de corrido pero después, a la tarde, me dormía en cualquier lado. Dormía y me ahogaba. En ese momento, era antes de la pandemia y trabajaba en una agencia de noticias. Y como iba con mucho sueño, me tenía que tomar una bebida energizante para mantenerme en pie”, recordó Gastón.
“El otro día, un amigo compró una, me oferció y me retrotrajo a esa situación de tomar eso, comerme un paquete de galletitas, alfajores, ahogarme al subir la escalera del subte. Le dije ´no, paso´. No quiero volver nunca mas a eso. No como una obsesión sino como un cambio de vida”, destacó Marote.
“Como sano, hago ejercicios con laburo aeróbico y musculación, me cuido, duermo bien. Manteniendo eso, no se engorda. El proceso fue paso a paso: primero cinco kilos, después diez, luego veinte… Y cuando llegué a los 86 pensé en estirarme a 80 pero considero, y muchos me dicen lo mismo, que ahí estoy bien”, compartió Gastón con Paparazzi.
“Ahora viene la parte que todos marcan como la más difícil: mantenerse. La idea es ir entre dos o tres veces por semana al gimnasio y seguir con Valna. No hice terapia porque esto es algo que me lo propuse yo, mi familia fue un gran apoyo”, confió Marote, integrante del equipo de Pollo Alvarez y Sandra Borghi.
“Mi meta es no volver atrás. El médico me encontró muy bien después de aquel pico de presión que tuve y que me hizo el click para cambiar mi estilo de vida. Zafé, de milagro, de que en las piernas se me haga una trombosis y me las tuvieran que cortar. Y hoy, eso también es un recuerdo”, cerró Gastón, que tiene una conmovedora historia familiar.
