Días atrás y aconsejado por un allegado, Gustavo Sofovich hizo una transacción económica que no resultó como esperaba. A fin de tener un vehículo de alta gama y ahorrarse unos pesos, el productor desembolsó unos cuantos dólares y cuando se encontró con el auto no era lo que esperaba.
Por el contrario, tal como contaron en Socios del Espectáculo y donde incluso el damnificado dio su testimonio, el modelo que tanto le había gustado al director de Polémica en el Bar dista mucho de lo que le habían ofrecido y prometido que le darían.
En medio de la bronca que lo atraviesa y en tanto intenta dar con el paradero de la persona que lo estafó, Gustavo explicó: “Compré un usado, seleccionado. Me lo vendió un tipo que se llamaba Nacho, que no sé el apellido, todo arreglado con taquitos de madera por dentro”.
“Me chorearon olímpicamente. Desapareció este ser y no pone la cara. Me mandó un tipo amigo y me dijo ´comprale uno usado seleccionado a Nachito´. Y Nachito me vendió un auto usado seleccionado y me choreó”, continuó el hijo de Gerardo Sofovich.
A GUSTAVO SOFOVICH LE COBRARON MILLONES POR ALGO QUE NO LE DIERON
Antes de terminar la nota con el cronista de Socios del Espectáculo, Gustavo remató: “Y tiene que hacerse cargo del coche y no aparece. Por eso estoy enojado con el programa de ustedes”. Luego de aclarar que su mala onda no tenía que ver con el ciclo de chimentos de El trece los conductores cerraron el tema de esta sección de la bomba.
“Le pusieron maderas para sostener el chasis. Estaba truchísimo. La bomba es la nota, la nota es la bomba”, agregó Rodrigo Lussich. A lo que Adrián Pallares concluyó: “Pobre Gustavo, va a decir que le bailamos la estafa, pero todo se baila acá”.
