El tradicional programa del mundo del espectáculo ahondó en el análisis de lo que dejó la mega transmisión Unidos por Argentina, en la que se recaudaron fondos para afrontar el coronavirus. En ese contexto, Jorge Rial volvió a dejar en claro su postura de la estadía de Marcelo Tinelli en Esquel.
En el ciclo de América TV pormenorizaron en detalles como la dificultad para coordinar los diferentes conductores que estuvieron en la emisión, así como en la pelea de egos y el blooper de Mirtha Legrand en confundir a Mariana Fabiani con Vero Lozano.
Inmiscuido en todo ese contexto, Rial quiso detenerse en Tinelli y primero se refirió a la extensísima duración del mensaje del presidente de San Lorenzo. “Nos llamaron a los conductores de los programas para que hagamos un video, y además de pedirnos que sea de buena calidad y bien iluminado, nos pidieron que sea algo corto. A mí me llamó más la atención la extensión del video de Tinelli que la poca extensión del de Susana”, contó el periodista dando a entender que Marcelo dispuso de ciertos privilegios para extenderse más de lo recomendado.
A LOS CONDUCTORES NOS PIDIERON QUE SEA ALGO CORTO, A MI ME SORPRENDIÓ LA EXTENSIÓN DEL VIDEO DE TINELLI
Claro que no terminó ahí la alocución de Jorge, que continuó socavando en su pensamiento sobre el conductor del Bailando y le tiró una indirecta. “Por eso me llamó más la atención el video desde la clandestinidad de Esquel de Tinelli que lo corto que fue lo de Susana”, sentenció el comunicador con una utilización nada azarosa de la palabra clandestinidad.
ME LLAMÓ LA ATENCIÓN EL VIDEO DESDE LA CLANDESTINIDAD DE ESQUEL, BUENO EN EL EXILIO
Adrián Pallares intentó poner paños fríos y le dijo que Marcelo no estaba ilegalmente en la Patagonia, sino que se hallaba en una casa de su propiedad. Eso abrió la puerta a otro palito de Jorge, que manifestó: “Bueno, en el exilio. No lo agarró allá (la cuarentena), viajó”.
Por último, para rematar su pensar del traslado a Esquel, el conductor de Intrusos dejó entrever una especie de filtración de datos a la que accedió Marcelo. “Eso en mi barrio se llama información privilegiada”, aseveró Jorge y sin decir específicamente puso sobre la mesa su juicio.
