Rocío Marengo habló por primera vez tras el suicidio de Gustavo Martínez, tutor de Marta y Felipe, el mes pasado. En LAM, la pareja de Eduardo explicó por qué se celebró el cumple de los chicos, a pocos días del terrible desenlace de su tutor.
"Estuve, más o menos, dos meses afuera del país. en el medio, volví a trabajar, a grabar para Minuto para ganar y volví para relajar un poquito... El cumpleaños de Martita y Felipe estuvo muy lindo. Es muy lindo acompañarlos a ellos en fechas importantes, estar en un montón de momentos de su vida y vivirlos con ellos", arrancó Rocío, en una nota para el programa de Angel De Brito.
"No quiero entrar en detalles pero es lógico que vienen de pasar un momento espantoso, que cualquiera lo hubiese vivido mal. y ellos, como cualquier persona, tratan de salir adelante después de algo gravísimo que les pasó. Les pregunté cómo estaban después de lo de Gustavo", continuó Marengo.
"Cada uno sabe cómo se comportó y por qué lo hizo. Yo me fijo en lo que hago y como yo me comporto con dos menores que acaba de cumplir los 18 años. Pero no nos olvidemos que cuando pasó toda esta tragedia eran dos menores, para mi siguen siendo chiquitos y hay que seguir cuidándolos porque vienen de pasar situaciones muy difíciles", hizo hincapié Rocío, sobre el momento que atraviesan los adolescentes.
"Eduardo fue el primero en enterarse de lo de Gustavo pero no quiero entrar en detalles del como... ya pasó, ahora hay que mirar para adelante, y todo lo que viene. porque lo que pasó no es ir a un entierro y ya está. Después, vienen otras cosas que también hay que estar. Me parece que fue todo muy injusto, que lastimaron a dos chicos, que lastiman continuamente a una familia. El 95 por ciento de las cosas que se dicen de la familia son mentira", aseguró Marengo.
"La única que estaba afuera era yo, que estaba en Miami, la familia estaba acá. Ya había planes organizados y me pareció lo más correcto esperar. Y a los pocos días estábamos juntos y atravesando esta situación que no es fácil. Que la gente se ponga por un segundo en los zapatos de las criaturas o de la gente de la familia que tuvo que vivir todo esto, no está bueno. algunos no lo tomaron con seriedad como correspondía haberlo tomado", remarcó Rocío, molesta con la situación.
"Los últimos meses no lo vi a Gustavo y tampoco lo conozco demasiado. Lamentablemente, Gustavo estaba enfermo para tomar una decisión como la que tomó. Llegar a ese límite es porque, lamentablemente, estaba mal. Los chicos vivieron eso", analizó Marengo, quien es pareja del tío de ellos hace ocho años.
"Eduardo es una excelente persona. Estoy con él hace ocho años y sé todo lo que pasa en la familia. No estaría con una mala persona. Los chicos son dos divinos que, como chicos, pueden reaccionar un día de una manera y otro día, de otra. Por más que una persona esté enferma y tome la decisión de matarse, todo el resto no tiene que dejar de vivir. La familia no habló. Si actuó o no actuó, no se sabe. La familia está tranquila porque sabe que hizo las cosas bien", afirmó Rocío.
