Nicole Neumann armó las valijas para continuar con su rotation interminable, ese raid extensísimo de vacaciones, de dispersión, de viajes múltiples. La blonda sigue en un periodo de descanso inacabable. Tras recibir el Año Nuevo en Las Grutas, después se movilizó a Punta del Este y ahora a Europa.
Las preocupaciones no forman parte del presente de Nikita, quien luce muy relajada y totalmente estimulada por conocer paisajes y monumentos en Valencia, a donde se dirigió para acompañar y seguir a sol y sombra a su novio Manu Urcera, y que luego continuó con unas largas jornadas en Madrid.
Esa travesía en el Viejo Continente obligó a que la modela deba desprenderse durante algunas semanas de sus tres hijas. Y para lo cual las dejó a cuidado de Fabián Cubero y su novia Mica Viciconte, que transita por el embarazo de Luca Cubero.
Esa decisión de moverse en soledad y buscar un asilo para sus niñas le valió una catarata de críticas en las redes sociales, porque muchos internautas consideraron que se trató de un gesto de desaprensión poco recomendable para una madre.
Ya en suelo argentino, Nikita armó un kilométrico posteo, con fotos de su aventura romántica en Europa, en el que le respondió a esas recriminaciones. La modelo se justificó y aportó su visión de esa determinación de alejarse por un lapso tan prolongado de sus soles.
En ese vehemente descargo, Neumann argumentó: "Y Aunque no pueda estar 24/7 con mis hijas como quisiera, también disfruto que puedan compartir con su papá. Son tres personitas con nombres propios que me mantienen fuerte y me necesitan feliz".
En cuanto al viaje a España y la maniobra de entregarle sus hijas a Cubero, Nicole exclamó: "Acompañar a mi pareja en sus proyectos mientras mis hijas cumplen sus días de vacaciones con su papá (así como los tuvieron antes conmigo, mismos días) es importante para mí”.
