En la noche del viernes, Jey Mammon cerró la semana con una invitada muy especial y es que logró que en su famoso sillón de Los Mammones se sentara la joven cantante María Becerra.
Además de hacer un mini show con voz y piano, y entonar algunas reconocidas canciones con la chica de 21 años, el conductor también mantuvo un divertido ida y vuelta con la artista que habló sobre sus proyectos laborales, contó detalles de su intimidad y reveló increíbles anécdotas de su corta carrera musical.
Sin embargo, sorprendió a todos los presentes al contar cómo fueron sus inicios en los medios y al revelar que abandonó sus estudios para poder volcarse de lleno al mundo del espectáculo.
“A los 15 años empecé con YouTube”, afirmó María, quien además se sometió a las preguntas de Jey que quiso conocer cómo logró cambiar sus videos en la red social para convertirse en la mujer más escuchada de Argentina.
“Llegué a la música porque creo que se me cruzaron las personas y las oportunidades indicadas. Tuve mucha suerte también, las cosas se me dieron tal cual quería, también con mucho trabajo y dedicación, pero hubo mucha gente que confió en mí”, contó Becerra.
Asimismo, explicó cómo fue su historia: “Siendo youtuber dejé la escuela. Me faltan dos años, quinto y sexto año”. Y ante esta revelación, el conductor le preguntó si le “dan ganas en algún momento de terminarlo”, y la cantante comenzó a reírse y con la cabeza hizo el gesto que "no".
"Siendo youtuber dejé la escuela. Me faltan dos años, quinto y sexto año. Pero la verdad que no quiero terminarla"
Con la risa de todos los presentes, agregó: “Si te soy sincera, no”. Por lo que, tentado, Jey le retrucó: “Me encanta porque la respuesta políticamente correcta para cualquiera que está en la tele dice ‘la verdad que sí, me encantaría’, pero vos nada, cero”.
A pesar de mantener su postura, la artista sorprendió al confesar: “Mi papá me va a matar cuando vea esto”. Pero, además, desmintió el rumor de que había dejado sus estudios para ayudar económicamente a su familia, aunque admitió que siempre en su casa fueron muy trabajadores: “Jamás hemos pasado necesidades la verdad, mi papá laburó un montón también. Llegó a tener siete trabajos, en distintas clínicas porque es cardiólogo, no estaba en casa”.
