Estaba todo oscuro. Había caído la noche en pleno mediodía. Pero él veía mejor que nunca. Y veía todo. Planetas, el sol, la luna, las estrellas... hasta la felicidad observaban sus ojos y sus sentimientos. Si hay algo que tiene José Bianco es que es un apasionado de lo que hace. Un fanático de buscar y perseguir fenómenos naturales y climáticos. El denominado eclipse solar del siglo, ocurrido hoy, lo encontró gritando como si Argentina se hubiera consagrado campeón del mundo del fútbol. Para él se había hecho la luz.
Movedizo y aventurero como pocos, Bianco viajó a Piedra Del Aguila, en Neuquen, para ubicar allí la mejor visión del eclipse y transmitirla para Canal 13 y para TN, los canales donde trabaja. Y subido a una formación natural rocosa, precisamente, vivió el momento en el que el sol quedó alineado con la luna y "se tapó" por completo. No sólo eso: con su particular manera de "relatarlo" se lo hizo vivir a la gente como si estuviera allí.
¡¡¡Noooooo, no puede ser!!! ¡¡Esto es lo mejor del mundo!!! ¡¡¡Miren con cuidado, con las protecciones necesarias!!! ¡¡¡Esto es como estar en otro planeta, en otro mundo, es algo que siempre esperamos ver y es el momento que siempre soñamos".
"¡¡¡Noooooo, no puede ser!!! ¡¡Esto es lo mejor del mundo!!! ¡¡¡Miren con cuidado, con las protecciones necesarias!!! ¡¡¡Esto es como estar en otro planeta, en otro mundo, es algo que siempre esperamos ver y es el momento que siempre soñamos con que pasara, y está sucediendo en la Argentina. Aquí estamos nosotros!!!" gritó Bianco como si Messi convirtiera frente a los arqueros de Brasil, o de Alemania, en una fina ecuménica.
Emocionado, el bahiense le pidió a la gente que "¡¡Disfruten por favor porque vamos atener que esperar muchos muchos años para volver a ser testigos de un acontecimiento como este. Es algo único!!". Según las estimaciones de los meteorólogos, el para observar una nueva edición de un eclipse habrá que esperar hasta 2048.
Al final, Bianco lamentó cuando la luna y el sol volvían a quedar desfasados y el día volvía a ser luminoso, tras un par de minutos de intensa y completa oscuridad en pleno mediodía. "No, por favor, que no se termine. Mi cabeza no logra retener los recuerdos de un momento tan especial y tan único. Esperamos tanto tiempo por esto que duele que se vaya".
Cuando aparece José Bianco se ilumina la tele.
