El periodo de aislamiento social obligatorio englobó un sinfín de emociones para Marcelo Tinelli. Un arco de situaciones que varían desde el auscultamiento popular por su traslado a Esquel, el cumpleaños de su hijo, el célebre vuelo privado con medicamentos y la confirmación del retorno del Bailando por un sueño.
El hombre más importante de la televisión experimenta casi un reality de su vida, porque los medios posan las miradas en todos sus movimientos y analizan todos los detalles. Claro que las redes sociales influyeron también, por la constante compartimiento de momentos, así como por la facilidad para divulgar una información para cualquier usuario que se tope con el productor.
En esa línea, los medios llevaron a cabo un paso a paso del viaje de regreso de la familia Tinelli desde la Patagonia, como si se trata de The Truman Show. Con detalles de hasta dónde cambiaron el neumático o cuántos controles policiales detuvieron la marcha.
En los últimos días el foco se movió a las reuniones de preproducción de la nueva edición del certamen de baile. Con las especulaciones de la fecha de debut, las variantes para evitar el contacto de los participantes y otras cuestiones.
Ahora la nota la aportó una de las hijas de Marcelo, Micaela, quien en su perfil de Instagram subió un video de octubre pasado, en el que el conductor se une a un baile improvisado de sus pequeñas Cande y Juanita. En ese pequeño fragmento queda en claro la complicidad del oriundo de Bolívar con sus amadas, así como una discutible percepción del tempo.
Lo importante es que Tinelli se acopló con buena onda al juego y movió el cuerpo con buenas intenciones y mucha energía positiva. Esta perla, que data del 25 de octubre, vio la luz gracias a un reconto de Micaela, que este lunes posteó una serie interminable de recuerdos que almacena en su celular.
