El Wandagate, el tan mentado Wandagate, sigue aportando todo tipo de aristas, nuevos capítulos, más datos que brotan a la luz, situaciones increíbles. Ya se conocieron los acontecimientos y se supo la verdad respecto a la infidelidad, que no fue en el plano digital, sino in situ.
El escándalo del año lo protagonizan Mauro Icardi, China Suárez y Wanda Nara, porque hace semanas que están en boca de todos. En ese raid de información ya se corroboró que el futbolista invitó a la actriz, que le reservó una habitación de hotel y que se entrelazaron en las sábanas el 25 de septiembre.
Impresionante el nivel de detalles. En todo ese entuerto cayó Jakob Von Plessen, el marido de Zaira Nara, ya que quedó signado como una especie de cómplice de Icardi. Incluso su participación, probablemente involuntaria, le causó problemas en su matrimonio.
Ahora Mauro salió a ofrecer su verdad y no escatimó en nada, aceptó todos los cargos y admitió su engaño, su grosera infidelidad. Todo surgió de la voz de Yanina Latorre: “Él me dijo ‘todo lo que dijiste es verdad, Jakob me esperó en el auto, yo reservé la habitación a nombre de Facundo Llorente, yo le regalé la remera rosa del PSG a la China’”.
Así, el futbolista del PSG enterró a su cuñado, al reconocer que estuvo en el momento del encuentro físico. Esto no lo colabora para nada en la crisis de pareja que mantiene con Zaira. Mucho se ha dicho de su rol y la reconstrucción del caso tiende a suponer que no le quedó otra opción que aguardar a que Mauro jugara con la China.
Ahora, esa comunicación de Icardi con Latorre abrió otra ramificación de esta polémica, porque la panelista exteriorizó: “Me dijo ‘pero acá hay un problema, si a vos no te lo dijo Wanda, esto lo está pasando la China’”.
