Nazarena Vélez sigue desentrañando vivencias muy íntimas, en sintonía con su campaña de compartir contenidos de su pasado en su canal de YouTube. En esa plataforma ha narrado cuestiones muy dolorosas, como ser abusada, golpeada y amenazada por una expareja, o aquella de la grabación sin su consentimiento de relaciones sexuales.
Ahora volvió a saltar a la arena de confesiones, claro que con otro tenor. La rubia se dedicó a abordar experiencias de atracción, y hasta relaciones íntimas, con dos mujeres. Lo que le llevó a reflexionar y considerarse bisexual.
“Yo tuve dos experiencias con chicas. Yo me consideraría heterosexual para la sociedad, pero particularmente bisexual debido a esto. Igual, esos motes me caen como el ort... Yo soy yo. Después, lo que me guste en la cama estaría siendo un temita mío. Pero vamos a desmitificar esto”, arrancó la mamá de Barbie.
Yo soy yo. Después, lo que me guste en la cama estaría siendo un temita mío
Ya embalada, Nazarena describió este gusto: “A mí las mujeres me encantan, me parecen hermosas. Y me pasa desde muy chiquita. Yo admiro mucho a la mujer”. Asimismo, ratificó que ama a los hombres.
Primera vez
A la hora de revelar ese eslabón primario, Vélez narró: “Un día conocí a una chica, una amiga, llamémosla Luz, no voy a decir su nombre. Divina, amorosa. Declarada gay, me lo dijo ni bien me conoció”. En una época de apenas separarse del padre de Barbie.
Todo comenzó a transformarse, de ese carácter inicial de amistad a otro estadio. “Pronto empezó a volcarse para otro lado. Un día empecé a darme cuenta de que me interesaba estar todo el tiempo con ella. Y no me copaba que ella fuera a un boliche. Entonces me pregunté, ¿qué onda? Y después, sin que ella se enterara, empecé a mirarla distinto", soltó.
Hasta que en un episodio nocturno se produjo el beso. “Me encantó, no puedo decir otra cosa. Lo lamento por quienes se estén horrorizando. Me pareció súper sensual, me gustó. Y después ella se quedó como con culpa y no pudimos tener nunca más la misma amistad”, exteriorizó. Aunque no terminó bien y por eso describió que no se animó a dar un paso más.
Me pareció súper sensual, me gustó.
Segundo flechazo
Nazarena continuó con su sinceridad, por eso contó el otro capítulo de atracción con una dama. “Diez años más tarde me hice amiga de quien era mi asistente en el teatro y también nos pasó algo así. Cuando estábamos para avanzar yo también di marcha atrás”, lanzó.
Para terminar, Vélez intentó hallar una razón de no transitar un poco más allá con estas dos mujeres. Remarcó que tal vez se vincule con la satisfacción de recibir sexo oral. “¿No tendrá que ver con eso? Que yo pensaba 'si no nos chupeteamos una a la otra, ¿qué onda?'. Es la inseguridad del torpe, porque de última hablás. ¿No será eso?", finalizó.
