Ni bien le propusieron interpretar una de las obras más célebres de William Shakespeare, Hamlet, Joaquín Furriel ni lo dudó. Muy emocionado y agradecido por la propuesta, aceptó. Feliz, les contó a sus seguidores que siempre había querido ponerle el pecho a un clásico de esta índole. Si bien le está yendo muy bien, hubo una función que jamás podrá olvidar...
En diálogo con el programa radial Perros de la calle, el actor reveló que tuvo que frenar la obra y calmar a los espectadores. ¿Por qué? El público se peleó y él no pudo seguir con su interpretación. ¿Cuál fue el motivo que encendió la pelea? El celular de uno de los presentes sonó y los demás, enojadísimos, no se la dejaron pasar.
"En un monólogo, que es con el que se termina la primera de las tres partes, de repente arrancó a sonar un celular, pero lo que pasó es que era un ringtone tipo ta ta ta... algo muy invasivo’’, comenzó contando. Divertido, el actor dio detalles sobre la incómoda situación: "Me paro porque escucho un shhh y de repente una persona grita 'por favor el teléfono', en esa situación yo me quedo callado y retomo el monólogo. Cuando retomo se escucha otro teléfono y ahí se arma como un espectáculo en la platea, porque uno grita ‘por favor apaguen los teléfonos', y empiezan a pelearse tipo tribuna, hasta que uno grita ‘pobre Furriel'".
Antes de cerrar, Joaquín confesó que no supo bien qué hacer. Entonces... ¡no hizo nada! Esperó a que los presentes terminaran de pelearse y, cuando vio que las aguas se habían calmado, continuó con la obra.
Joaquín tuvo que frenar la obra y esperar a que los espectadores dejaran de pelearse.
