El estupor permanece en el aire, la sorpresa mayúscula pulula en el inconsciente colectivo por la decisión de romper esa pareja tan querida, y que configuró una historia de amor extensa de más de doce años entre los dos famosos internacionales.
La separación de Shakira y Gerard Piqué convulsionó el mundo, por la repentina velocidad con la que se encadenaron los hechos, tras los incipientes rumores de una crisis y la inmediata determinación de la colombiana de oficializar el fin de la relación.
“Lamentamos confirmar que nos estamos separando. Por el bienestar de nuestros niños, que son nuestra máxima prioridad, pedimos respeto a la privacidad. Gracias por su comprensión”, aseguró la cantante en un comunicado que envió a distribuir por una agencia.
Desde ese punto el foco se direccionó a descubrir si el futbolista cometió una infidelidad y sobre todo una caza de los medios por identificar a una supuesta azafata de veinte años, con la que el zaguero habría mantenido un romance apasionado en el último tiempo.
Claro que otro de los temas neurálgicos en toda esta ruptura se vincula con el patrimonio económico, por los bienes infinitos que adquirieron en todos estos años de amor. Por eso, la prensa se centró en averiguar a cuánto asciende la fortuna que deben dividirse Shakira y Piqué.
Algunos medios de España informaron que este engorroso procedimiento ya se activó entre la cantante y Piqué, incluso confirmaron que para tamaña tarea optaron por un asesoramiento muy específico: “Los dos han contratado abogados especializados para iniciar los trámites”.
En lo referido a los patrimonios compartidos, el sitio web Celebrity Net Worth aseguró que la cifra asciende a 700 millones de euros, a partir de las carreras profesionales de la artista musical y el defensor. No obstante, el hecho de no haberse casado permite identificar con mayor claridad el capital independiente de cada uno.
